Syva ha empezado a producir sus primeros kilovatios de electricidad. “Se trata de un paso importante en la vida de nuestra empresa, que se ha comprometido a reducir el impacto de sus actividades en el medio ambiente, mejorando constantemente su eficiencia energética y reduciendo su dependencia de los combustibles fósiles, como parte de un enfoque de desarrollo sostenible”, declaró César Carnicer, director general de este laboratorio leonés.
El proyecto de energía fotovoltaica de Syva forma parte del Plan de Eficiencia Energética que el área de Ingeniería, Mantenimiento y Utilities comenzó desarrollar en 2019, y que consiste en una serie de proyectos muy concretos destinados a reducir sus costes energéticos y su huella de carbono. A nadie se le escapa que una empresa de alta tecnología de esta envergadura, cuya misión es mejorar la salud y el bienestar de los animales ofreciendo soluciones que tengan sentido, está comprometida a nivel social con la preservación de lo que ahora se conoce como el ecosistema Onehealth.
Esta propuesta de instalación de paneles fotovoltaicos ya se había presentado como iniciativa propia en 2020, y aunque entonces no avanzó, este primer estudio fue el punto de arranque fundamental para llevar a cabo los numerosos análisis necesarios para elaborar un pliego de condiciones estricto y preciso, con el fin de licitar a las distintas empresas de ingeniería e instalación activas en el sector fotovoltaico.
Plan de eficiencia energética
Como señala Jorge de la Varga, responsable del plan de eficiencia energética ecoSyva y Manager del Área de Ingeniería, Mantenimiento y Utilities de Syva, poner en marcha un plan de este tipo representa un gran desafío técnico en el contexto de una planta de producción de vacunas y productos zoosanitarios.
“Tratamos de hacer una ingeniería versátil que abarque el conjunto de actividades desarrolladas dentro de una industria farmacéutica y la multitud de acciones tecnológicas del entorno entre las que destacan la optimización de los recursos, la búsqueda de la eficiencia de los sistemas productivos y el ahorro energético, de esta manera aspiramos a mantener alineados los objetivos de nuestra empresa con los de la sociedad actual y mantener nuestro compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente”, indica.
La instalación de 1.535 paneles fotovoltaicos es la primera y más importante fase de un plan de EcoSyva para los próximos 7 años, con el objetivo de reducir drásticamente su dependencia energética y su huella de carbono para 2030.
Reducir la huella de carbono
Los 1.535 paneles fotovoltaicos instalados en los tejados de las unidades de producción de Syva en el Parque Tecnológico de León ocupan una superficie de 3.070 metros cuadrados, con una capacidad de producción de energía de 844,25 kWp a máxima eficiencia. Esta producción energética será 100% autoconsumida por nuestras plantas de producción de vacunas y antibacterianos, y representa alrededor del 15% del consumo total.
Las estimaciones indican que la instalación reducirá las emisiones de gases atmosféricos en 273,21 toneladas de CO2 al año, así como 392,05 kg de SO2 (dióxido de azufre) y 554,20 kg de NOx (óxido de nitrógeno) producidos por la combustión de combustibles fósiles. Esto corresponde a la capacidad media de absorción de un bosque de 1.636 árboles. También se calcula que el retorno de la inversión será inferior a 6 años.
La siguiente fase importante del plan ecoSyva, dentro del marco de la captación solar, tendrá lugar en 2024, con la instalación de paneles fotovoltaicos sobre la cubierta de nuestra sede central, situada también en el Parque Tecnológico de León, frente a nuestras unidades de producción de medicamentos veterinarios. Estos paneles cubrirán algo más del 25% del consumo anual de energía del edificio esencialmente administrativo.
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