Castilla y León se encuentra trabajando en el próximo presupuesto. Todo indica a que el próximo ejercicio sufrirá no pocos recortes, algo -por otra parte- con bastante sentido común y económico.
También los medios de comunicación se vienen haciendo eco en los últimos días de este recorte presupuestario, anunciando alguno de los capítulos que sufrirán el castigo de contar con muchos menos fondos que el ejercicio pasado. Parece como si, por mucho repetirlo, nos quisieran ablandar y poner en sobreaviso de lo que nos espera. Como si de este modo no fuese tan duro.
Hasta aquí, todo parece normal dada la situación que llevamos viviendo. Bueno, casi normal, ya que si comparamos con el sector privado, la Administración se ha dado cuenta cuatro años después de que había que hacer algo. Pero no es éste el punto clave de mi reflexión.
Ingenio para elevar los ingresos
Lo que me gustaría compartir con ustedes es la sensación de que nos estamos olvidando de trabajar la otra mitad del presupuesto; es decir, los ingresos. Es de valorar el esfuerzo de nuestro Gobierno regional en estudiar a fondo cómo hacer lo mismo con menos dinero, o dicho de otro modo, cómo recortar la parte de los gastos sin que se note en exceso. Perfecto hasta aquí. Pero ¿y los ingresos? Bajo mi humilde parecer, echo en falta en el debate político y periodístico algo de protagonismo hacia la parte de los ingresos. Tengo la sensación de que estamos tan volcados en los recortes que está siendo olvidado el ejercicio de pensar en la manera que tenemos de ingresar más. Pienso que debemos tener algo más de imaginación para abordar en profundidad la manera que tiene Castilla y León de obtener un mayor provecho de su tierra y sus personas, de manera que existan maneras y actividades diferentes que nos permitan optimizar nuestros recursos a fin de compensar la merma de los ingresos que venían siendo ordinarios hasta el comienzo de la crisis.
Las empresas iniciaron la fase del gasto hace cuatro años; ahora lo hace la Adminsitración. Las empresas llevan dos años intentando modificar su estrategia comercial y su focus en la actividad para obtener más ingresos (lésase mediante los procesos de internacionalización, tecnológicos, de recursos humanos, etc). Por una regla de tres, intuyo que los gobiernos pensarán en esto en un plazo aún de otros dos o tres años. Ah! y no vale la idea de subir impuestos, eso se le ocurre a cualquiera.
Muy acertado tu comentario, Eduardo. Las empresas llevan al menos cuatro años tomando medidas contra la crisis, las que no lo han hecho han tenido que cerrar. ¿Por qué no ocurre lo mismo en la Administración, por qué tardan tanto en adoptar medidas y por qué no cierran las administraciones ineficaces y obsoletas?
Enhorabuena por tu blog.
Gracias por tu comentario. LAs empresas comenzaron a ajustarse hace cuatro años. Ahora lo hace la Adminsitración y mucho más despacio. Así estamos.
Estimado Eduardo:
Lo bueno de ir al recorte es que con un poco de suerte, y la necesitamos, se recortará lo superfluo, lo improductivo, lo innecesario. Imagínate si logramos incrementar los ingresos. Se acabó el debate de la necesidad o no de las Diputaciones, Miembros de Consejos Consultivos y de Cuentas, funcionarios, asesores externos, etc..
Enhorabuena por tu blog. Un saludo de un seguidor
Muchas gracias por tus reflexiones Eduardo. Y efectivamente las administraciones van/vamos siempre mucho más despacio que el mundo empresarial. Como siempre se achaca al sistema administrativo pesado y lento la ralentizacion en determinadas medidas. Pero lanzo una pregunta.¿no habrá detrás grupos de presión (ya sabemos que en españa no existen los lobbies) que impiden que se tomen medidas buenas para todos menos para esos grupos de presión?
ISABEL CLAVERO
Muy acertado su artículo con la que está cayendo.
En el caso de las administraciones, la única forma que se les ocurre de aumentar los ingresos es aumentando los impuestos o resucitando los ya suprimidos, ahí tenemos a nuestro “amigo” Alfredo R. con el Impuesto de Patrimonio….
Subir impuestos lo hace cualquiera. ¿Donde están los grandes líderes que gobiernan desde la imaginación? No los tenemos.
Hola Eduardo:
Interesante punto de vista, ya que las administraciones públicas sólo saben aumentar sus ingresos mediante la subida de tasas e impuestos. Sin embargo, son incapaces de optimizar y poner en valor todo su patrimonio, sobre todo el inmobiliario. El mejor camino para ello sería liberalizar numerosos servicios públicos, para que las empresas puedan rentabilizar esos activos que en estos momentos no sólo no producen ingresos, sino que además generan gastos.
Saludos.
Enhorabuena por tu blog.
Totalmente de acuerdo, hay que reducir los gastos y aumentar los ingresos, pero sin subir los impuestos, es decir consiguiendo que aumente la actividad económica que es lo que necesitamos todos.
El problema es que para hacer esto necesitamos cambiar el “chip”. Pocos saben gestionar las crisis desde las carencias ya que todos hemos estado a aconstumbrados a gestionar en la abundancia en los últimos años.
Eduardo
Como siempre Sr. Estevez muy acertado. Plantea usted una utopía a las actuales administraciones y una realidad a la empresa pública.
Diferencias?? Muchas y muy importantes como que las administraciones desconocen lo q es despedir a la gente y echar el cerrojo. Es por esto y otras razones que hemos estado “alimentando” una estructura administrativa apesebrada y segura de su existencia pase lo que pase. ¿Para q romperse la cabeza buscando soluciones cuando ya otros se la rompen por ti y encima algunos se arruinan?
Por desgracia dudo mucho que las administraciones y satélites de turno sepan dar una respuesta creíble a su planteamiento. Este país necesita soltar lastre “administrativo” entre otros si no quiere compartir cama con el mismísimo Titanic.
Disculpas, donde dije “empresa pública” quería decir “empresa privada”.
Querido amigo:
En estos años la Adminstracion se ha arrogado el poder de crear empleo. Quienes crean empleo son las empresas, y la Administración debe generar el marco adecuado para que así suceda. Cosas diferentes….
Gracias por tu comentario