Es un Espace, pero ya no es un monovolumen. Ahora el famoso modelo del rombo cambia radicalmente y entra en el mundo de los SUV para conquistar nuevos clientes, asumiendo el riesgo de decepcionar a los antiguos. Pero si tenemos en cuenta los comentarios, el paso de monovolumen al SUV de 6 plazas no es un drama pues las opiniones son bastante positivas. Pero los nostálgicos del último Renault Espace monovolumen tienen argumentos para la crítica. En efecto, si este modelo presenta unas dimensiones más generosas que el Austral (más 21 centímetros, con 4,72 metros de largo) y una mayor distancia entre ejes (más 7 centímetros) y del voladizo trasero (14 centímetros), vemos que el nuevo Espace es menos espacioso que el anterior.
El último punto débil es que los asientos ocultos en el suelo del maletero sólo son utilizables por niños o adolescentes pequeños.
Imagen cuidada
Pero si el pragmatismo fuera la receta mágica para un automóvil exitoso, todos conduciríamos cajas sobre ruedas. Así que para atraer a las familias, este nuevo Espace apuesta por otros argumentos.
El primero es cuidar la imagen. Bien presentado y equipado con materiales y ajustes excelentes, el salpicadero es el mismo que el del Austral con 2 pantallas que garantizan facilidad de uso a través de una interfaz diseñada con Google. Control por voz eficaz, combinación inteligente entre teclas táctiles y botones físicos, todo es fácil de entender. Y, en términos de habitabilidad, permite viajar con mucho espacio y comodidad a cinco personas.
Motor hibrido
Y a esto se suma un muy agradable motor híbrido. Funcionamiento suave, silencioso gracias a la conducción eléctrica omnipresente en ciudad, el híbrido E-Tech, único motor disponible, que se adapta a este gigante como un guante. El sistema esconde la unión de un 1.2 turbo con un motor eléctrico (50 kW) acoplado a un alternador-arranque (25 kW), todo lo cual permite beneficiarse de 200 CV.
Este Espace de 4,72 metros de largo no es tan pesado como podría pensarse pues hablamos de 1.760 kilos. Sin problema para los 200 CV. De 0 a 100 km/h se alcanza en 8,8 segundos y el kilómetro recorrido en 31,2 segundos desde parado. Mejor aún, las aceleraciones son eficientes con menos de 6 segundos para pasar de 80 a 120 km/h.
Pero es sin duda la sobriedad en el consumo lo que impresiona. Es sorprendente que un automóvil de este tamaño gaste sólo 4,5 l/100 km en ciudad y 6,2 l/100 km en carretera. Al final, sólo en autopista sube a 7,1 l/100 km.
Para diferenciarse mejor de otros SUV familiares grandes, el Espace apuesta por 2 ventajas definitivas. La primera es el gran placer de conducir, garantizado por la dirección en las ruedas traseras, muy útil para las maniobras en ciudad, o en carretera por la agilidad que proporciona. Su última baza es la de un competitivo precio, desde 43.500 euros.
En conjunto, virtudes que, incluso para los nostálgicos del monovolumen, hacen de este Espace SUV una tentación.
