El número de parados inscritos en las oficinas de Empleo de Castilla y León cayó en 4.446 personas en marzo y la cifra de desempleados baja de la barrera de los 120.000 y se sitúa, en concreto, en 119.646, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
En términos relativos, en Castilla y León el comportamiento del paro cayó un 3,58% en marzo respecto a febrero, cuando en España bajó un 1,67%, con lo que la cifra de parados en el conjunto del país cae en 48.755 personas hasta situarse en un total de 2,86 millones.
Se trata del tercer mayor descenso anotado en las comunidades autónomas en términos relativos, tras Islas Baleares (-4,17%) y Cantabria (-3,88%), y de la tercer mayor bajada en términos absolutos, tras Andalucía (-15.284) y Canarias (-5.775).
Evolución interanual
Y en comparación con marzo de 2022, el paro registrado en Castilla y León descendió un 8,07% (10.507 desempleados menos), la sexta mejor evolución del país. En España el descenso es inferior, en concreto del 7,93% (el equivalente a 246.503 personas).
Desciende en todas las provincias
El paro cayó en marzo en comparación con febrero en todas las provincias lideradas por Zamora, con un 6,14% menos y 637 parados menos. A continuación, se sitúan Burgos y Soria, con un 4,67% y un 4,49% menos en cada caso (759 y 147 parados menos), seguidas de Ávila (-4,28% y 418 parados menos), Palencia (-3,96% y 305 parados menos) y Segovia (-3,79% y 229 desempleados menos).
El resto de las provincias están por debajo de la media autonómica: León (-3,46% y 851 desempleados menos); Salamanca (-2,67% y 526 personas menos en las listas del desempleo) y Valladolid (-2,17% y 574 parados menos).
Y en comparación con marzo de 2022 el paro también cayó en todas las provincias de Castilla y León y el mayor descenso del desempleo se registra de nuevo en Palencia, con un 10,59% menos y 877 parados menos, seguida de León (-9,63%, 2.528 desempleados menos), Valladolid (-9,17% y 2.611 parados menos) y Soria (-8,6% y 294 parados menos).
Por debajo de la media autonómica (-8,07%) se sitúan Burgos, con un -7,92% y 1.332 parados menos; Salamanca, con un -6,75% y 1.387 parados menos; Zamora, con un 6,16% y 639 parados menos; Ávila, con un -5,84% y 579 desempleados menos, y Segovia, con un -4,28% y 260 personas menos en las listas del paro.
Así, en la actualidad el número de parados en Castilla y León (119.646) se reparte del siguiente modo: Ávila, 9.340; Burgos, 15.478; León, 23.724; Palencia, 7.402; Salamanca, 19.174; Segovia, 5.812; Soria, 3.124; Valladolid, 25.861, y Zamora, 9.731.
Sectores
Por sectores, el paro registrado en las oficinas de empleo de Castilla y León en marzo cayó en todos liderados por servicios (-3.613) y ya de lejos por industria (-350), construcción (-344), agricultura (-123) y el colectivo de sin empleo anterior con 16 menos.
En la actualidad, el número de parados en Castilla y León (un total de 12.344 son extranjeros, 4,75% menos que en 2022, lo que supone 615 personas menos, y un 2,53% menos que en febrero, 321 menos en términos absolutos) se distribuye por sectores del siguiente modo: 84.947 en el sector servicios; 11.831 en el colectivo de sin empleo anterior; 9.782 en industria; 7.471 en construcción y 5.615 en agricultura.
En cuanto a la situación por sexos, el paro en Castilla y León se reparte entre 48.034 hombres y 71.612 mujeres, si bien en el tramo de edad más joven (menores de 25 años), los hombres desempleados superan a las mujeres con 4.755 frente a 4.672.
Valoración de CEOE Castilla y León
Una vez analizados los datos del desempleo en Castilla y León correspondientes al pasado mes de marzo, CEOE Castilla y León considera que, a pesar de ser positivos, no reflejan el dinamismo que la economía que la comunidad autónoma necesita para el crecimiento empresarial y la consolidación de un empleo estable y duradero.
De igual forma, la patronal castellana y leonesa advierte de que el establecimiento de nuevas obligaciones y cargas para las empresas, como el incremento de cotizaciones sociales, no van a resultar positivas en tanto que las mismas se van a traducir en una reducción de los recursos empresariales que deberían emplearse en todo momento al crecimiento empresarial y, con él, a la consolidación de un empleo estable y duradero.
Por ello, insiste en que la continuidad de las empresas y su creación pasan necesariamente por un marco regulatorio seguro y previsible y con reducción de cargas burocráticas. “Solo en el ámbito de las relaciones laborales en España, en los últimos seis meses, 14 normas, de origen laboral o no, contienen medidas que afectan a la gestión de las relaciones laborales sin que ese sea el objeto de su regulación, creando un marco jurídico profuso, confuso y disperso. A estas habría que añadir otras tantas que se encuentran en cartera”, apuntan desde CEOE Castilla y León.
Asimismo, la confederación aboga por un marco regulatorio flexible que permita la rápida adaptación a los múltiples desafíos -demográfico, geopolítico, digital, ecológico y global-, así como por la adopción de decisiones que garanticen la preservación del tejido empresarial y prioricen el mantenimiento y la creación de empleo.
Castilla y León Económica / Europa Press