El Gobierno, las comunidades autónomas y las organizaciones y cooperativas agrarias se han unido para trasladar a Bruselas el rechazo “frontal” de España a una propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC) que, a su juicio, “no sirve” y afecta “gravemente” a la agricultura nacional. Rosa Aguilar, ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, afirmó tras la celebración del Consejo Consultivo de Agricultura que el Estado será “contundente” en el consejo de ministros de la UE que se celebrará el 20 de octubre y donde expondrá la “posición de país” acordada este lunes.
Aguilar explicó que España planteará su oposición a la ficha financiera e instará al comisario Dacian Ciolos a que “primero se aclare el presupuesto con el que va a contar la agricultura europea y después se proponga la reforma que corresponda”. La titular del ramo aseguró que el Gobierno trabaja ya con todos los Estados miembros con los que tiene una “mirada común” hacia la propuesta, como Francia, Alemania, Italia, Portugal y Grecia.
Contra los pagos directos
En concreto, el Gobierno y las comunidades autónomas rechazan la propuesta de tasa plana en los pagos directos, al entender que “va en contra de la agricultura productiva” y muestran su “discrepancia total” con la definición de agricultor activo. Igualmente, España “no consentirá” que se apruebe una cofinanciación superior al 50% en el segundo pilar de la PAC, el desarrollo rural, y reivindicará que este documento recoja “apoyos concretos” a la mujer en el ámbito de la agricultura y propuestas para el rejuvenecimiento de la actividad agraria.
Gobierno y comunidades autónomas también consideran que las medidas de gestión de mercado son insuficientes, porque “no se tiene en cuenta la realidad actual en relación con las crisis alimentarias y con la volatilidad de los precios que ha perjudicado de manera tan importante a la ganadería”.
Europa Press / Castilla y León Económica