Mahou-San Miguel invirtió el pasado ejercicio un total de 27,6 millones de euros en sus 7 fábricas, para el desarrollo de proyectos dirigidos a la producción de nuevos productos y formatos, al incremento de la eficiencia energética y la sostenibilidad y a la optimización logística, entre otros. El objetivo de estas inversiones, según informó la compañía, es “seguir contando con las instalaciones más punteras del sector, que garanticen la máxima eficiencia, calidad, seguridad y respeto al medio ambiente”.
En los últimos 10 años, el grupo cervecero ha destinado más de 258 millones de euros al área industrial para la incorporación de las tecnologías “más novedosas” en sus fábricas de Alovera (Guadalajara), Burgos, Candelaria (Tenerife), Córdoba, Granada, Lleida y Málaga. Estas instalaciones suman una superficie global ocupada, destinada a la actividad fabril, que ronda el millón de metros cuadrados.
Mahou-San Miguel destacó que, de este modo, ha convertido sus fábricas en “centros de producción modernos que combinan la más pura tradición cervecera con un alto grado de automatización, lo que permite tener una garantía total de calidad de producto y un excelente comportamiento medioambiental”. Actualmente, cuenta con una capacidad de producción de 15 millones de hectolitros al año.
Europa Press / Castilla y León Económica