Las entidades financieras españolas obtendrán unos 13.000 millones de euros gracias a las quitas impuestas a la deuda subordinada y a las participaciones preferentes, según calcula la agencia de calificación crediticia Fitch, que, advierte de que los bancos podrían necesitar más capital en función de los resultados del arbitraje por la mala comercialización de estos productos complejos, que podría afectar al 20% del total.
Por otro lado, la agencia advierte de que, si bien los progresos en la reforma del sector bancario español son “buenos”, aún persisten riesgos para el sector, incluyendo un deterioro adicional de la calidad de los activos de la banca, cuya rentabilidad se verá afectada por los bajos tipos de interés y la morosidad.
“Hay varias cuestiones pendientes que influenciarán en el éxito o el fracaso del proceso”, apunta Fitch Ratings, que mantiene una perspectiva “negativa” sobre el sector bancario español en general.
Pesimistas
“Somos pesimistas respecto a la calidad de los activos y nuestros ‘ratings’ asumen un incremento de los préstamos en riesgo de mora este año a medida que los problemas se extienden a los préstamos a pymes y a las hipotecas residenciales”, señala la agencia.
Asimismo, Fitch espera que las provisiones por riesgo de crédito se mantengan elevadas, “aunque probablemente no a los niveles de 2012”, y advierte de que la gestión del Sareb de su cartera de activos podría tener un “efecto llamada” sobre la calidad de los activos de los bancos no recapitalizados.
Castilla y León Económica/ Europa Press