Durante más de 15 años, la industrias de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC’s) de Castilla y León han experimentado un proceso de crecimiento, consolidado entre otras cuestiones por la creación de infraestructuras de soporte como Parques Tecnológicos (Boecillo, León y ahora Burgos), la implantación de grandes empresas del citado sector nacional e internacional en nuestra comunidad autónoma, la creación de algún Centro Tecnológico para la transferencia de conocimiento a esta industria y la aparición de iniciativas autóctonas que han permitido completar uno de los tejidos industriales más diverso del país en un sector de actividad clave para la competitividad empresarial.
Las TIC’s deben ser ejes vertebradores de la competitividad en al ámbito de la economía regional. En lo que se refiere a la industria, es esencial que la gestión de la cadena de valor esté afectada en todo su ciclo (acopio, transformación, venta y gestión administrativa de la empresa) por una correcta implementación de las tecnologías de la información dentro de la empresa. Siempre debe haber cabida para soluciones TIC’s en la industria. Sin embargo, es importante analizar la singularidad del tejido TIC’s en Castilla y León:
Dos bloques de empresas
En cuanto a su perfil y fisonomía, nos encontramos con un sector dividido en dos bloques empresariales que ejercen en desigual medida influencia sobre el sector. Por un lado, tenemos a las grandes empresas a las que antes hacía referencia, empresas que implantadas a lo largo de estos últimos años en la comunidad autónoma, han sido capaces de crear capacidades laborales y transferir de tecnología a sus centros para dar cabida a un importante número de profesionales castellanos y leoneses que lejos de tener que migrar sus conocimientos a otras regiones, han podido desarrollar su capacidades y encontrar un proyecto de vida en este tipo de empresas. Las grandes empresas a las que me refiero desarrollan soluciones y en mayor o menor medida han venido colaborando con empresas regionales. En muchos casos, este tipo de empresa se implanta para acercar sus soluciones y prestar sus servicios a la Administración, bien sea regional o local.
Por otro lado, surge el sector autóctono de las TIC’s, un sector absolutamente necesario para la supervivencia de esta actividad en Castilla y León que se ha ido creando a lo largo de todos estos años. En algunos casos, este sector con dimensiones de reducidas daban servicio a los grandes proyectos en los que las grandes empresas TIC’s nacionales o internacionales implantadas en la región les subcontrataban parte de su actividad. En otros casos, el sector autóctono nace de la determinación de emprendedores locales que se lanzan a la tarea de crear un proyecto empresarial basado en el desarrollo de soluciones (productos) TIC’s para dar servicio privado y público.
Defendemos que ambos perfiles son necesarios y complementarios, unos para traer tecnología y crear capacidades laborales y otros para desarrollar tecnología y producto propio que permita que Castilla y León tenga un grupo de empresas locales capaces de decidir su estrategia en base a un criterio de anclaje territorial.
Sector afectado por el ciclo económico
El ciclo económico en el que nos encontramos (primero crisis y luego recesión) ha adelgazado lógicamente las capacidades de compra pública de las Administraciones en general. Este hecho, unido a que el mercado público puede representar para el sector TIC’s alrededor del 50% de su negocio, ha hecho que el mismo se vea afectado por una tormenta de enormes dimensiones en la que confluyen otros agravantes como la falta de financiación, falta de producto que defender en otros mercados y falta de acceso al mercado privado.
En resumen, el entorno en el que se mueve la empresa TIC’s implantada en Castilla y León (sea de dimensión nacional o local) está condicionado por un mercado más reducido en lo que al ámbito público se refiere, un mercado privado poco proclive a la incorporación de soluciones TIC’s a su estructura por la necesidad de usar sus pocos recursos en la supervivencia, un sector financiero poco dado a confiar en este tipo de empresas, y una escasez de producto autóctono que defender en otros mercados en lo que desde las Administraciones hemos prescrito como reglas básicas para salir fortalecido de la recesión (más internacionalización e innovación).
Vender en ‘casa’ y en el exterior
En este sentido y respecto a esta última circunstancia, es lógico pensar que para todas las empresas regionales que son capaces de crear producto TIC’s vía innovación, les es muy difícil introducirlo en el exterior si no cuentan con el beneplácito de la deseada referencia local. Es decir, no podrán vender fuera lo que no vendan en su casa, sobre todo si hablamos de producto para la gestión pública.
Todo este escenario de gran dificultad nos lleva a una situación si cabe algo más complicada cuando las empresas de dimensión nacional o internacional se muestran lógicamente más activas en los procesos de compra pública, condicionando con ello las posibilidades de empresas más pequeñas que no pueden competir con las capacidades de las grandes.
Las consecuencias de todo este escenario se dejan notar en términos de actividad y empleo. Afrontamos un ciclo en el que asistimos a ERE de grandes empresas, y a ERE o cierres de otras de menor dimensión.
Medidas y soluciones
Hasta ahí la radiografía de un sector clave en el crecimiento y competitividad de nuestro sector empresarial. ¿Medidas y soluciones?
– Especialización mayor para lograr más producto que poder introducir a escala nacional e internacional. A esta especialización ayuda la política de clusters. En el caso de las TIC’s de Castilla y León, se han definido ya 3 áreas de especialización en clusters (Movilidad, Seguridad y Tecnologías Asistivas).
– Motivación en los planes sectoriales aprobados por el Gobierno regional para la creación de producto TIC’s en cada uno de los sectores por los que se apuesta. Esto ayudará a la creación de producto TIC’s ligado al sector privado, sector que debe incrementar su peso en la cartera comercial de la mayoría de las TIC’s de Castilla y León.
– Apoyos a través de las líneas de I+D+i a proyectos enfocados a la creación de tecnología y un producto cercano al mercado y cuya consolidación genere patente o valor agregado dentro de Castilla y León.
– Un mercado público que tenga en consideración el deseable equilibrio entre empresas de distintas dimensiones, pero todas ellas necesarias para el devenir del sector en Castilla y León.
– Una sensibilidad sobre los modelos factibles de internacionalización de este tipo de empresas.
– Conciencia y apoyo financiero a un tipo de empresa que en muchos casos se ha visto desprovista de las líneas de crédito necesarias para acometer el día a día de su actividad.
– Consolidación de un Catálogo de Productos en clave regional.
Aun en la tesitura de dificultades en la que nos encontramos, es admirable la capacidad con la que empresas de este sector están respondiendo a todas estas dificultades. El año 2011 se adivina complicado en la parte financiera, el sector por tanto va a estar expuesto al proceso de redimensión que inició hace dos años.
Resistir
Nuestra industria será más competitiva en tanto en cuanto el sector TIC’s de Castilla y León sea capaz de resistir a este ciclo. Es labor de todos los agentes que formamos el sistema económico (incluyo también a las Administraciones) el entender las singularidades de un sector transversal para impulsar medidas, no sólo económicas, para el fortalecimiento del sector TIC’s en Castilla y León.
En consonancia con los intereses comunes que tenemos en relación a las TIC como avance para la sociedad y en concreto para las empresas, les invito a conocer mi blog: http://tuasesortic.blogspot.com/ que versa sobre ayudas tic en el día a día del departamento contable y administrativo en la empresa.
Las medidas y soluciones propuestas, si; pero además en tiempo y forma.
Los momentos actual y futuro requieren, entre otras actuaciones:
– Líneas de financiación avaladas por la viabilidad (si la tiene) del propio proyecto y permanentemente abiertas para I+D e internacionalización
– Plazos de resolución de treinta días por parte de Administración para los programas de apoyo.
En definitiva, hacer en plazos del mundo de la empresa privada lo que la empresa privada necesita. En doce meses muchas empresas sacamos al mercado dos versiones sucesivas de un producto cuyo desarrollo iniciemos en el mes cero.