Las cajas de Ávila y de Segovia -ambas integradas en Bankia– celebraron este jueves asambleas generales para analizar el estado de sus cuentas tras la reformulación de las de Banco Financiero y de Ahorros (BFA), con una valoración negativa de 13.635 millones de euros. De acuerdo con los datos aprobados, la entidad abulense acumula pérdidas de 402.000 euros, mientras que la segoviana mantiene 10 millones de liquidez y cifra en 19,97 millones el valor de su patrimonio neto.
En la Asamblea General de Caja de Ávila, la última presidida por Agustín González, se precisó que las cuentas fueron aprobadas por el Consejo de Administración el 30 de marzo de 2012 y formuladas de nuevo el 11 de junio del mismo año, por lo que “han pasado de valores positivos a arrojar unas pérdidas de 402.000 euros, derivados de la actualización de las estimaciones de probabilidad de obtención de ingresos fiscales futuros”.
También la Asamblea General de Caja de Segovia fue la última con la actual composición de consejeros: en menos de un mes se producirá el relevo de todos lo grupos que la conforman y la creación de una Asamblea constituyente, tras lo cual se nombrará el nuevo Consejo de Administración que asumirá la transformación de la entidad en una fundación de carácter especial.
Europa Press / Castilla y León Económica