Lo que seduce de inmediato al acercarse al Defender 90 es su imagen poco convencional, pues el británico es una especie única. Y, en mi opinión, con un enorme carisma. Aún corto, alcanza los 4,32 metros, lo que es más que suficiente para incluso 5 personas a bordo. Ante el conductor, la tecnología está muy presente, destacada por la pantalla táctil del sistema Pivi Pro, muy bien organizado.
A pesar de su físico de bulldog, el Defender convence en dinámica de conducción. La suspensión neumática nos hace rodar sobre terciopelo y, al tiempo, contiene los movimientos de la carrocería. Nuestro Defender 90 recoge todas las ayudas a la conducción corrigiendo el excesivo optimismo de su conductor si se empeña en provocar a las leyes de la física. La velocidad máxima está limitada a 188 km/h.
En las carreteras principales, el Defender corto sigue siendo imperial, una delicia para conducir a lo largo y ancho. La insonorización es buena y sólo deja pasar el agradable zumbido del 6 cilindros de 249 CV: hay también disponible de 200 y 300 CV diésel, y de 300, 400 y 525 CV gasolina, más un híbrido enchufable de 404 CV.
Diésel de 249 CV
Nuestro diésel de 249 CV empuja bien y encaja perfectamente con el temperamento plácido de este 4×4. Por el lado del consumo, es difícil bajar de los 9 l/100 km, que sigue siendo correcto con un 2,4 toneladas tan robusto que ha de desplazar mucho aire cuando se mueve.
A pesar de esta masa, la reductora, la tracción total permanente con un diferencial central bloqueable y el sistema All Terrain de tracción permiten salir del asfalto con una eficacia asombrosa. En una jungla más hostil como es la ciudad, va bastante bien.
Maletero
Todo va bien en este extraordinario universo, hasta el momento de abrir el maletero. Ridículamente pequeño, es prácticamente inservible en una configuración de 5 plazas. Los respaldos de las banquetas son abatibles, por supuesto, pero sin piso plano con, por el contrario, un gran borde formado por el refuerzo de los asientos. El altísimo umbral de carga y esta pesada puerta debido a la presencia de la rueda de repuesto de 20 pulgadas no facilitan la carga/descarga.
Si Land Rover ha cedido su evolución hacia el mundo de los 4×4 de lujo, el Defefender corto afortunadamente mantiene su deliciosa distinción, muy english, en un segmento que carece de modelos con fuerte personalidad. Y eso perpetuando su capacidad de moverse por cualquier sitio. Feliz quien pueda disfrutarlo: a partir de un precio de 80.000 euros y sumen muchas posibilidades de personalización en este coche de gran personalidad.