Leticia García, consejería de Industria, Comercio y Empleo, y Enrique Cabero, presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León, se reunieron este lunes con el propósito de reforzar las líneas de colaboración entre la Junta y el máximo órgano de consulta y asesoramiento en materia socioeconómica de Castilla y León.
La consejera recordó que el CES de Castilla y León es una institución propia de la comunidad autónoma recogida en el Estatuto de Autonomía, que cumple una función de consulta y asesoramiento, ya que mediante sus informes, recomendaciones y propuestas, canaliza la participación de los castellanos y leoneses en la vida política, económica, social y cultural de la región. Una labor especialmente valiosa a la hora de adaptar las políticas públicas a los retos y necesidades reales de las personas de Castilla y León.
Reforzar la colaboración
García se comprometió a facilitar esta tarea con 3 medidas concretas, la primera de las cuales se centra en remitir en tiempo y forma los datos e informes de las actuaciones llevadas a cabo desde la Consejería, con el fin de facilitar la elaboración del informe anual sobre la situación económica y social de la comunidad autónoma. En segundo lugar, cubrirá las 2 vacantes asignadas a la Consejería en el grupo de expertos que asesoran al CES en las materias relacionadas con las competencias propias del Departamento que dirige García. Y por último, remitirá para su consulta, antes de su aprobación, todos los proyectos normativos que emanen de la Consejería.
Por su parte, Cabero informó a la consejera del nuevo informe que está elaborando el CES sobre las vacantes del mercado laboral en Castilla y León. Un análisis sobre las vacantes de difícil cobertura en las empresas de Castilla y León, así como de sus causas y de las posibles medidas que se pueden llevar a cabo para dar respuesta a la falta de profesionales que plantean algunos sectores productivos.
Atender las recomendaciones
Por otra parte, durante la reunión, García informó al presidente del CES de los pasos que se están dando desde la Consejería para atender las recomendaciones de su último informe. En este sentido, se está fortaleciendo el entendimiento en el marco del Diálogo Social, se están poniendo en marcha las medidas necesarias para garantizar el normal funcionamiento de la Fundación Serla, y se están atendiendo las recomendaciones encaminadas a explorar nuevas oportunidades de empleo en el medio rural y a impulsar el desarrollo tecnológico y la transformación del tejido productivo de Castilla y León.
Dentro de las políticas activas de empleo, especialmente dirigidas al medio rural, la Junta de Castilla y León ha reforzado las distintas líneas del Plan de Empleo Local, con una inversión de 55 millones de euros destinados fundamentalmente a las entidades locales para financiar la creación de empleo y generación de nuevas oportunidades laborales mediante el aprovechamiento de los recursos endógenos. Este plan está permitiendo, a cerca de 6.000 castellanos y leoneses, trabajar y vivir en sus respectivos municipios a lo largo de este año, además de contribuir a la mejora del entorno y de los servicios que se prestan en el ámbito rural.
Adaptación del tejido productivo
Finalmente, en relación con la recomendación del CES de promover la adaptación del tejido productivo a los procesos de desarrollo tecnológico y transformación digital, la consejera ha explicado que, además de mantener los programas que se vienen desarrollando con éxito como el de Industria 4.0, ciberseguridad o modernización del comercio, se están desarrollando nuevas iniciativas para impulsar la innovación o el desarrollo de sectores emergentes. Entre estas iniciativas cabe mencionar el apoyo al Hub de Innovación Digital Industria 4.0 para la puesta en marcha de laboratorios orientados a la robótica colaborativa y tecnología 5G, o el apoyo a la creación del Laboratorio Tecnológico de Contenidos Digitales.
Igualmente, la consejera informó del esfuerzo que está realizando la Junta en el ámbito de la formación para el empleo con nuevos programas destinados a facilitar la formación y adaptación de los trabajadores a los cambios productivos generados por los avances tecnológicos.
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