Augusto Cobos, director del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICECYL), señaló este miércoles en Valladolid que la Junta lanzará un plan para impulsar la sostenibilidad de las empresas en el período 2025-27, en la clausura del III Foro Sostenibilidad y Economía Circular en Castilla y León (Hacia un modelo productivo con empresas e instituciones más competitivas, sostenibles, rentables y resilientes), que organiza Castilla y León Económica con la colaboración del Consejo Económico y Social de Castilla y León, Iberdrola, Fundación Cartif, Solartec Renovables y Fundación Centro Nacional del Vidrio y a la que asistieron más de 200 personas.
En este sentido, apuntó que esta hoja de ruta integrará este concepto en todos los aspectos de la competitividad empresarial a través de la promoción de prácticas que reduzcan el impacto ambiental, fomenten la equidad social y contribuyan al desarrollo económico de Castilla y León. “Se ha hecho un análisis del contexto regional en el ámbito de la sostenibilidad, así como un diagnóstico de la situación actual, pues si bien es el primer documento del que se dota el ICECYL, han existido otros en los que, de forma directa o indirecta, se recogían objetivos y medidas relativas a este campo, entre los que cabe citar las directrices para la implementación de la Agenda 2030 en Castilla y León, el Plan de Responsabilidad Social Empresarial de Castilla y León 2021-27, la Estrategia de Emprendimiento e Innovación EEI27, la Estrategia de Economía Circular de Castilla y León 2021-30 o el Plan de Impulso a la Bioeconomía Agroalimentaria para el desarrollo de un entorno rural competitivo y sostenible en Castilla y León”, puntualizó.
Asimismo, aseguró que se han detectado quiénes son los socios estratégicos “que nos pueden acompañar en la puesta en marcha de algunas medidas, favoreciendo su implementación adaptada a la realidad empresarial de nuestra región”. Los 10 objetivos principales de este plan se agrupan en 3 enfoques, como son ambiental (tecnologías limpias, circularidad y eficiencia energética), social (clima laboral, igualdad y capacitación) y gobernanza (planes de sostenibilidad, digitalización, transparencia y alianzas estratégicas). En cuanto a sus ejes de actuación, se han definido 6: concienciación, capacitación, consultoría, innovación, emprendimiento y un último de financiación y ayudas.
Rol protagonista
“Queremos asumir un rol protagonista en la promoción de un desarrollo empresarial sostenible en las empresas de nuestra comunidad autónoma, pero ese liderazgo exige un compromiso y una implicación que nos convierta en ejemplares. Por lo tanto, la implementación de ese plan tiene un reverso que es el plan de actuaciones interno para convertir ICECYL en una organización comprometida con la sostenibilidad”, comentó.
Por ello, compartió 2 de las acciones que se van a llevar a cabo en los próximos meses en la entidad. En octubre se celebrará una jornada monográfica sobre sostenibilidad para todos sus puestos directivos, con independencia del departamento en el que lleva a cabo su función. Por otro lado, ha establecido conversaciones con entidades que le asesoren en un proceso de auditoría interna para conocer qué tipo de actividades están ya implementadas alineadas con los objetivos de sostenibilidad, dónde tiene que introducir cambios y qué pasos debe seguir para conseguir la acreditación de Organización comprometida con la sostenibilidad, “pues como director, considero que si no damos ejemplo como entidad pública, difícilmente podremos concienciar y sensibilizar a las pymes de nuestra región sobre el valor de la sostenibilidad”.
No obstante, Cobos, quien habló también de bioeconomía, recordó que Castilla y León es referente en transición energética, ya que el 95% de la producción de energía eléctrica procede de fuentes renovables, “lo que la convierte en imprescindible para la consecución de los objetivos del plan nacional, integrado de energía y clima. Por ese motivo, trabajamos desde la Junta en conseguir que el 80% del suelo industrial de la región esté disponible con abastecimiento de energía renovable para todas las empresas en los próximos 5 años, facilitando que los negocios ubicados en nuestra comunidad accedan a una energía más sostenible y barata, mejorando así su competitividad”.
Por su parte, Enrique Cabero, presidente del CES de Castilla y León, destacó que el modelo de economía circular ha propiciado la transformación de la organización de las empresas y sus equipos y procesos de ordenación del trabajo, logrando que sean más productivos, sostenibles y respetuosos con la salud de las personas y el medioambiente, así como la aparición de un nuevo sector empresarial específicamente dedicado a prestar servicios transversales en este ámbito. A su juicio, también favorece la productividad, incrementa la competitividad, fomenta la innovación y, en consecuencia, impulsa el crecimiento económico y el empleo de calidad. “El Parlamento Europeo contempla, en este sentido, la creación de 700.000 nuevos puestos de trabajo entre 2021 y 2030”, apuntó.
Según explicó, las necesidades de la economía circular se han convertido “en uno de los principales acicates para la investigación, la innovación y la transferencia del conocimiento a los procesos industriales y productivos en general. La profunda transformación del concepto de residuo, que ha pasado de estimarse como una serie de problemas medioambientales y económicos para administraciones y empresas, a valorarse como una oportunidad para reducir las importaciones de materias primas, ralentizar el uso de recursos naturales, disminuir los riesgos para la salud humana, la alteración del paisaje y el deterioro del hábitat y la pérdida de la biodiversidad”.
En su intervención, incidió además que los avances en la producción y utilización del hidrógeno verde, vía de almacenamiento de la energía de origen renovable y posible combustible para la industria y el transporte, o del SAF (combustible sostenible para la aviación), con especial desarrollo en Castilla y León, ofrecen oportunidades interesantes para la consecución de mayor autonomía energética y de un uso cercano para el desarrollo de actividad empresarial en nuestro territorio.
“Castilla y León se ha situado en una posición competitiva en este ámbito, que presenta grandes oportunidades para crecer y reforzarse, con iniciativas empresariales innovadoras que cuentan con influencia en las políticas públicas. Es una ocasión sin precedentes que relanza la actividad empresarial de nuestra comunidad autónoma y ofrece nuevas realidades y oportunidades que han de aprovecharse”, indicó.
Mesas redondas
El encuentro incluyó 2 mesas redondas moderadas por Alberto Cagigas, director de Castilla y León Económica. En la primera, bajo el título Mercados emergentes en sostenibilidad, intervinieron Enrique Cobreros, director de Aeice; Dolores Hidalgo, directora del Área de Economía Circular de Cartif; y Eduardo Andrés Martínez, director de NODDO.
Así, Cobreros subrayó que lo importante de la economía circular es el cambio de modelo económico. En esta línea, reconoció que el propio mercado del sector del hábitat está evolucionando hacia la industrialización de la edificación. “No somos los primeros, pero no pasa nada. Estamos trabajando con Navarra, que es la región que lo está liderando”, destacó. Además, explicó los proyectos que se están dando en relación con la descarbonización de la madera en Castilla y León, “que es la segunda región de Europa con mayor potencial maderero que no aprovechamos”.
En su intervención habló también de que su clúster acoge a compañías que facturan más de 5.000 millones y tiene como objetivo “mirar lejos y alto y trasladar a las empresas cuáles son los gestores que les pueden ayudar a innovar”.
La directora del Área de Economía Circular de Cartif puso el foco en varios campos en los que trabaja en Castilla y León, como la utilización de materiales y residuos mineros y de industria metalúrgica para elaborar nuevos productos para la construcción, la recuperación de fósforo a partir de la industria ganadera y agroalimentaria o las microalgas, “que es un mundo por descubrir, pues sustituyen a tratamientos habituales que tradicionalmente generan fangos”.
Hidalgo apuntó que existen financiaciones que permiten “que las empresas puedan lanzarse con proyectos en estos temas; hay fondos, y las temáticas de esta jornada se cubren con estos fondos, pero hay que saber buscarlos”.
Por su parte, el director de NODDO aprovechó su participación para describir las distintas iniciativas de los 9 centros tecnológicos que pertenecen a la red, que impulsan más de 650 proyectos de I+D+i anuales, “como las relacionadas con la agroalimentación o la industria mediante la puesta en común de las capacidades de cada una de ellas”.
Según comentó, NODDO agrupa a centros tecnológicos que trabajan en áreas muy diversas, que emplean a 850 personas y facturan más de 60 millones con el objetivo de impulsar la competitividad a través de la innovación.
Por su parte, en la mesa titulada La Sostenibilidad en el núcleo de la estrategia, participaron María Durán, analista de Innovación, Medio Ambiente y Calidad de Iberdrola; Andrés Ortega, presidente de la Fundación Centro Nacional del Vidrio; y Marcos Cano, CEO de SolarTec Renovables.
La responsable de Iberdrola, que en 2023 fue considerada por la UE la utility privada que más invierte en I+D+i de todo el mundo, avanzó que la empresa cuenta con un importante know how en plantas solares flotantes y en el reciclado de palas de aerogeneradores. En este sentido, hizo hincapié en que ha desarrollado el concepto de agrovoltarismo.
Precisamente, abundó en la importante inversión de la compañía en redes inteligentes y en su apuesta por la sostenibilidad compartida con sus proveedores, lo que contribuye a la consecución de los ODS de las Naciones Unidas. “En Iberdrola hace ya más de 20 años desde que apostamos por las energías verdes, vamos a invertir en más capacidad de renovables y también en las redes para conducirlas”, dijo.
Por su parte, el presidente de la Fundación Centro Nacional del Vidrio afirmó que si hay un producto sostenible, “ése es el vidrio, no sólo por el material en sí, sino porque es fácil de reciclar y además no contaminante. Desde la Fundación tenemos un empeño en preservar las técnicas tradicionales del vidrio, ayudamos a difundirlas en todas sus vertientes y a través de la formación”.
‘Futuro tras el cristal’
En su intervención, Ortega señaló que Futuro tras el cristal es un proyecto “para dar sentido a todo lo que hacíamos dentro de la sostenibilidad con varios puntos importantes. El primero consiste en digitalizar y clasificar nuestros moldes, junto con la Universidad de Valladolid, para aprovecharlos al crear una biblioteca virtual que pueda ser utilizada por cualquier persona en cualquier parte del mundo. Otro de los planes es un programa de turismo sostenible alrededor del mundo del vidrio”.
Por último, Cano subrayó que SolarTec es una empresa de Castilla y León de 10 millones de facturación y 45 personas en su equipo, “que tiene una manera propia de entender la energía y todos sus procesos para generar la fotovoltaica renovable. Castilla y León siempre ha sido un referente en este ámbito”.
En la actualidad explicó que está trabajando en la cubierta fotovoltaica más grande de León. Otro proyecto en el que está inmerso es en la puesta en marcha de un centro de reciclaje de paneles solares; “hay un auténtico problema con los parques que se están desmantelando y queremos hacer una planta de reciclaje en Salamanca, que puede ser muy interesante para la región”.
En la presentación de la jornada, el director de Castilla y León Económica destacó que nuestra comunidad autónoma “es líder en España tanto en potencia instalada en energías renovables, eólica e hidráulica, como en la cantidad de energía limpia vertida a la red eléctrica. El mix energético de nuestra comunidad autónoma permitió que en 2023 casi el 89% del total de la generación eléctrica fuera renovable, frente al 52% del conjunto del país. En Europa, solamente Noruega obtiene un porcentaje mayor de producción eléctrica renovable que Castilla y León”.
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