El Hotel Radisson es una buena opción para alojarse a dos pasos de varios de los museos más importantes de Madrid, como el Prado, Thyssen, Reina Sofía y Caixa forum; con la ventaja añadida de que se puede ir andando desde la estación de Atocha, a muy poca distancia.
Se trata de uno de los hoteles más jóvenes de la cadena sueca Radisson Blu, ubicado en un precioso edificio neoclásico madrileño. Cuenta con 54 habitaciones de las que seis son suites. Diseñadas en todos marrones, grises y morados, presentan una decoración moderna, donde destaca una fotografía tratada por ordenador a gran formato que ocupa toda una pared.
Todas las estancias cuentan con pantalla de tv plana, conexión a Internet gratuita y cafetera Nespresso. Con categoría de cuatro estrellas, otras de las instalaciones del hotel son un pequeño Spa gratuito para los clientes, donde también ofrecen una amplia gama de tratamientos, y un mini gimnasio. Uno de los inconvenientes es que carece de parking.
Degustación de whisky
Posee un restaurante basado en productos de mercado, un bar con vistas a la plaza de Platerías y un espacio para degustar una buena selección de whisky. El desayuno deja bastante que desear, ya que se reduce a una corta selección de panes y embutidos, algo de fruta y el zumo de naranja no es natural. Se salva el café que es de Nespresso.