El Parlamento griego ha aprobado por 155 a favor y 138 en contra el nuevo paquete de medidas de ajuste presentado por el Gobierno de Yorgos Papandreu y que había sido exigido por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea para desbloquear el siguiente tramo de ayudas financieras en el marco del plan de rescate del país heleno, que evitaría así declararse en suspensión de pagos.
Tras lograr este miércoles la aprobación del Parlamento al conjunto del programa de ajustes, Papandreu deberá someter mañana a una nueva votación los detalles del plan de ajuste, que cuenta de plazo por parte de sus socios europeos hasta el próximo 3 de julio para ser promulgado y desbloquear así la concesión del nuevo tramo de ayudas por importe de 12.000 millones de euros.
Grecia debe hacer frente a vencimientos de deuda por importe de más de 12.000 millones de euros hasta finales del próximo mes de agosto, por lo que de no recibir esas ayudas Atenas se habría visto forzada a declarar la bancarrota del país.
78.000 millones entre recortes y privatizaciones
Este nuevo paquete de medidas de austeridad contempla más recortes en el gasto público y subidas de impuestos, con los que Atenas pretende mejorar en más de 28.000 millones la recaudación hasta 2015, un incremento que alcanzaría los 78.000 millones al sumar los ingresos previstos por el agresivo programa de privatizaciones anunciado, que ronda los 50.000 millones.
En concreto, el Ejecutivo griego pretende obtener 15.000 millones de euros mediante la privatización de empresas públicas en los 2 próximos años, cifra que se incrementaría en 35.000 millones adicionales con nuevas privatizaciones hasta 2015. El Gobierno heleno pretende vender participaciones en las compañías estatales de telefonía, juegos de azar, gestión aeroportuaria y electricidad.
Europa Press