Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta, destacó el peso especifico de la agroalimentación en Castilla y León, que representa el 26% del sector industrial regional y el 10% de la agroalimentación nacional, en la inauguración del Foro I+A+I (Industria Agroalimentaria Innovadora), celebrado este jueves en Valladolid y organizado por el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) y Castilla y León Económica.
García-Gallardo se hizo eco de la gran preocupación de este sector ante la falta de mano de obra para determinados puestos de trabajo. “Debemos reflexionar sobre este tema para casar la oferta y demanda”, apuntó el vicepresidente de la Junta, que subrayó: “se esta perdiendo la cultura del esfuerzo y las ayudas sociales excesivas no colaboran para que los jóvenes salgan de ese punto de precariedad. Las administraciones deben dialogar y tomar cartas en el asunto”.
El vicepresidente de la Junta apostó por la colaboración pública-privada para aumentar la innovación en el sector agroalimentario de la mano de Itacyl. Al respecto, destacó las ayudas para la realización de proyectos colaborativos público-privados de investigación industrial o desarrollo experimental (programa de doctorado) por valor de 850.000 euros; y el proyecto Retech PAN: Plataforma Transversal para aprovechar el potencial de las tecnologías disruptivas y fortalecer el sector agroalimentario español mediante el Internet de las cosas y la industria 4.0.
“Este año ha sido ha sido muy duro para el sector primario y hemos sido la administración que más ayudas hemos dado al respecto”, recordó García-Gallardo, quien reclamó menos regulación y mostró su preocupación por la competencia desleal extranjera, por lo que exigió que los productos que entran en nuestras fronteras cumplan las mismas normas que los producidos aquí.
Asimismo, apostó por asegurar la cadena de suministros para garantizar el abastecimiento de materias primas, sobre todo en este sector, y reivindicó la recuperación de la soberanía alimentaria. Así, defendió que Castilla y León puede ser punta de lanza en este campo a nivel nacional y concluyó: “tenemos la oportunidad de ser la despensa de Europa”.
Incentivos para la agroalimentación
Por su parte, Gerardo Dueñas, consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, fue el encargado de clausurar el acto, en el que también estuvieron presentes Carlos Pollán, presidente de las Cortes de Castilla y León, y Mariano Veganzones, consejero de Industria, Comercio y Empleo, y señaló que, pese a la importancia del sector agroalimentario de Castilla y León, “un inconveniente es el elevado número de microempresas, por lo que es preciso incentivar la innovación de estas compañías, con la ayuda del Itacyl, pero también con otros mecanismos tecnológicos”.
En su intervención, desglosó las líneas de ayudas destinadas a este sector, entre las que mencionó los cerca de 84 millones para la mejora de infraestruturas y competitividad; desarrollo de proyectos de I+D+i y de nuevos productos, con casi 5 millones; e impulsar los vínculos entre ciencia y empresas y la colaboración público-privada, que incluye un doctorado industrial, con una partida de 850.000 euros en una primera convocatoria, entre otros programas de incentivos.
Dueñas recordó que Itacyl pone a disposición de las empresas infraestructuras de innovación y comentó que, además de la atención a las compañías en sus centros, ofrece espacios de entre 41 y 47 metros cuadrados en su vivero en Zamadueñas (Valladolid). “El objetivo es mejorar el desarrollo de los emprendedores, apoyar la industria tradicional e impulsar su diversificación, favorecer el desarrollo de los negocios locales, dinamizar el tejido empresarial y aumentar las ventajas competitivas aprovechando los recursos de Itacyl”, señaló.
Competitividad de la agroalimentación
En palabras de Alberto Cagigas, director de Castilla y León Económica, “el tema de la jornada es de gran interés porque nadie duda de que la innovación es crucial para aumentar la competitividad de un sector como el agroalimentario, que en Castilla y León cuenta con más de 3.000 empresas, una cifra que lo convierte en el tercer tejido productivo de la industria agroalimentaria más numeroso del país”.
Asimismo, Cagigas comentó que, según un reciente informe, “Castilla y León es la tercera autonomía más competitiva en la industria de la alimentación y genera alrededor de 150.000 empleos y una producción superior a los 7.200 millones de euros. Por eso, del éxito del sector agroalimentario depende en gran medida el desarrollo de nuestra economía, el dinamismo de las zonas periféricas y evitar la despoblación en las poblaciones rurales”.
Apoyo a la innovación
Cristina León Cófreces, subdirectora de Investigación y Tecnología del Itacyl, detalló que las 3 líneas de trabajo básicas de este instituto se centran en la infraestructuras agrarias, calidad y promoción alimentaria e I+D+i agroalimentaria. “En estos 20 años, hemos adaptado nuestro trabajo a las necesidades del sector agrario, de los mercados, de la situación geopolítica y de las nuevas demandas de los consumidores”, recordó.
En su ponencia, León Cófreces recordó que el objetivo de la Plataforma de Dinamización de la Investigación e Innovación Agraria y Agroalimentaria 2021-27 es potenciar la actividad de este sector a través del desarrollo tecnológico y la I+D+i y avanzó que en la presente legislatura se incidirá especialmente en los ejes de agricultura y ganadería eficiente, competitiva y sostenible; bioeconomía circular agraria, con la valorización de recursos y subproductos sostenible; y vincular la I+D+i a los mercados y los consumidores.
Asimismo, realizó un viaje virtual por la amplia red de centros tecnológicos de Itacyl, que ofrecen servicios a todos los eslabones de la cadena alimentaria, desde la producción agrícola y ganadera, pasando por la innovación en la industria hasta llegar a la bioeconomía.
Casos de éxito
El Foro I+A+I contó con una mesa redonda en la que se plasmaron casos de éxito de la innovación en la industria agroalimentaria. En ella participaron Jesús Esteban, CEO de Harinera Emilio Esteban; Santiago Miguel, consejero delegado del Grupo Hermi; José Luis Pascual, cofundador y gerente de Bodegas Pascual Fernández Frontera Natural; y Jesús Sanz Esteban, administrador de Campoveja Quesería.
El CEO de Harinera Emilio Esteban destacó que esta empresa está entre las 3 harineras de Europa en alimentación infantil, y trabaja también en ingredientes para cereales de desayuno y bebidas vegetales. “No queremos ser campeones de la molienda, sino en innovación”, apuntó.
Asimismo, señaló que su objetivo es “crear un equipo multidisciplinar” y apuntó que desde hace 15 años tienen abiertos 1 ó 2 proyectos de I+D+i cada ejercicio. Así, explicó proyectos para optimizar el consumo de energía o de deshidratados de vegetales.
En este contexto, el consejero delegado del Grupo Hermi detalló que la compañía cuenta con el 40% de cuota de mercado en España y 16% en Europa, genera 245 puestos de trabajo directos y trabaja con unos 200 ganaderos. Miguel, señaló también la importancia de la anticipación en la evolución del negocio y su capacidad de adaptación a través de la innovación. “En los últimos años hemos invertido 3 millones de euros en proyectos de innovación”, apuntó el empresario, que puso en valor el trabajo de los recursos humanos de la compañía, que permiten avanzar en este campo.
Además, comentó que Hermi desarrolla nuevas presentaciones que faciliten el consumo y productos bajos en grasa, como hamburguesas. Sin embargo, reseñó que es en los procesos industriales donde más ha innovado la compañía, tanto en la ganadería como en la industria, y desglosó algunos como aumentar la vida útil, aprovechamiento de subproductos y mejora de la alimentación de los animales, entre otros.
Por su parte, Pascual destacó la ubicación de la bodega en Fermoselle (Zamora) y explicó que desarrolla actuaciones para la recuperación de la tradición vinícola de la zona para elaborar grandes vinos.
“Trabajamos para aprovechar el patrimonio genético de la tierra y el saber hacer milenario de la zona”, comentó el cofundador y gerente de Bodegas Pascual Fernández Frontera Natural, que destacó la recuperación de 10 variedades minoritarias de uva, que “están perfectamente adaptadas al territorio, pero que necesitaban ser elaboradas con respeto”.
En su intervención en la mesa redonda, Sanz Esteban explicó que su quesera “aúna tradición e innovación” y destacó que esta dedicación permite que sus productos se encuentren en restaurantes con estrellas Michelin y en las mejores tiendas gourmet.
Además, comentó que el proceso de innovación de Campoveja Quesería se ha centrado en la elaboración de diferentes variedades de quesos, “al igual que otras queseras artesanas”, como quesos de corteza lavada. En la actualidad, la compañía trabaja en mejorar el afilado de los productos, “un aspectos apenas trabajado en España hasta muy recientemente”.
Castilla y León Económica