España recibió en julio la visita de 2,5 millones de turistas internacionales, un 75% menos que en el mismo mes de 2019, pese a la progresiva apertura de fronteras tras el fin del estado de alarma, según datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Asimismo, el gasto realizado por los turistas extranjeros alcanzó en julio los 2.450 millones de euros, cifra un 79,5% inferior a la del mismo mes de 2019, mientras que la duración media de los viajes fue de 8,1 días, lo que supone un aumento de 0,6 días con respecto a julio de 2019.
El secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, considera que “estos datos reflejan cómo la Covid-19 está afectando de manera negativa en el sector turistico por las restricciones a la movilidad a nivel internacional y la falta de la confianza en los viajes internacionales”.
No obstante, para Valdés es significativo que el turista que ha visitado España haya optado por estancias incluso más largas que en 2019: “Demuestra que entre quienes deciden viajar a nuestro país la Covid-19 no ha alterado sus planes en lo que a duración de la estancia se refiere, lo que es indicativo de la percepción de España como destino seguro”, ha señalado.
Francia fue el principal país emisor, con 597.244 turistas, lo que representa el 24,2% del total y un descenso del 58,4% respecto al pasado pasado. Alemania y Reino Unido fueron los siguientes países emisores, aportando 432.302 (un 65,2% menos en tasa anual) y 377.886 visitantes (un 82,5% menos), respectivamente.
Castilla y León Económica/ Europa Press