Eustaquio Andrés Sánchez se inició en el mundo de los neumáticos con apenas 14 años “sin saber dónde me llevaría esta elección, pero tenía mucha confianza en mis posibilidades y muchas ganas de avanzar. Trabajé muy duro, observé mucho y me lancé allí donde vi una oportunidad”, recuerda este salmantino de 69 años que en 1980, con 29 años, puso en marcha Neumáticos Andrés, la matriz de una compañía que en la actualidad factura 171 millones, con una plantilla de 220 trabajadores y presencia en 27 países de cuatro continentes.
“No sabría decir si tomé en esos años la decisión de ser empresario, aunque está relacionado con el momento en que percibí que podía comprar y vender neumáticos, como distribuidor entre fabricantes y talleres. Decidí emprender y asumir riesgos y 40 años después lo sigo haciendo”, destaca el empresario, que añade: “mis primeros recuerdos están relacionados con el mundo del automóvil. Creo que desde la primera vez que pisé un taller imaginé mi vida relacionada con este sector, aunque nunca pensé que podía llegar a ser una parte tan importante de la distribución de neumáticos en España”.
Aunque no es amigo de dar consejos, el presidente del Grupo Andrés recurre a su propia experiencia para recomendar a los empresarios de Castilla y León que no se conformen con hacer las cosas como los demás, que opten siempre por innovar. “Lo que hagan todos no nos interesa”, explica este emprendedor, que también sugiere ser austeros en los gastos en los comienzos y reinvertir los beneficios en el negocio. “Hay algo con lo que no estoy de acuerdo y conviene que sepan: es mentira lo de que el tren sólo pasa una vez en la vida. No es cierto, pasa muchas veces. Resbalar y caer forma parte de emprender. No puede hacer que perdamos las ganas, hay que reemprender y levantarse hasta tener nuevos éxitos”, subraya Eustaquio Andrés Sánchez, quien reclama a las administraciones su apoyo incondicional a los emprendedores, como líneas de ayuda y facilitar el networking: “debe tener una actitud proactiva anticipándose a las necesidades de los empresarios y apoyando en lo posible sus negocios”.
Cambio de modelo
Para el fundador del Grupo Andrés, el punto más difícil de su trayectoria tuvo lugar en sus inicios, cuando “estábamos poniendo en marcha el mercado de la distribución de neumáticos tal y como hoy la conocemos. Fueron momentos complicados pero muy estimulantes”, señala este empresario, que detalla que las dificultades provenían de su voluntad de entrar en un negocio reservado a fabricantes y concesionarios, con quienes “las negociaciones fueron muy tensas y duras, aunque con el tiempo ambas partes vimos que éramos complementarias y capaces de cubrir las necesidades de los profesionales con calidad, cantidad y rapidez”. Asimismo, este aficionado a los coches, sobre todo los clásicos, y al golf, deporte que practica desde hace tiempo, presume de sus raíces salmantinas, donde siempre ha vivido, y reconoce propuestas de consultoras para cambiar su sede al centro de España, “pero siempre hemos preferido apostar por la región y por Salamanca”.
Tras su fundación en 1980, Neumáticos Andrés inició la distribución al por menor en Salamanca y las provincias limítrofes, lo que se convirtió en un ámbito regional en pocos años. Ya en la década de los 90, la compañía implantó un modelo de negocio de distribución independiente nacional y realizó las primeras exportaciones a Portugal, al tiempo que se convertía en proveedor oficial de diferentes marcas. La consolidación de envíos internacionales tuvo lugar a partir del año 2000 y reforzó su distribución con dos nuevos almacenes en Madrid y Barcelona. La siguiente década estuvo marcada por la implementación de la primera plataforma tecnológica B2B del sector, la más importante del mercado, que coincidió con una intensa estrategia de expansión internacional y acuerdos con grandes plataformas logísticas. En esos años, la compañía amplió las oficinas y se implantó un innovador sistema de logística con entrega en 24 horas en toda la Península Ibérica. Todo ello acompañado de una profunda renovación tecnológica de la Plataforma Online Profesional, que incluyó una estrategia de gamificación y que en 2019 superó los 4 millones de pedidos online; la ampliación de los almacenes de Barcelona y Madrid; y la implantación de la Red de Puntos de Servicio Onneu.
A partir del pasado ejercicio, el grupo inicia un proceso de crecimiento en el sector con inversiones estratégicas en empresas que están protagonizando la revolución del mercado automovilístico y logístico en áreas como la movilidad sostenible, con Motos Eléctricas Velca y Electric Auto; en optimización tecnológica del transporte de mercancías, con Transeop y Truckster; y mejoras en la distribución, con Amazon, entre otros.
La compañía cuenta con almacenes en Salamanca, Madrid y Barcelona y plataformas logísticas en Portugal, Levante, Centro, Andalucía, Cataluña, Galicia, Asturias y País Vasco.
Nueva sede central
En la actualidad, afronta las obras de construcción de su nueva sede central en Salamanca, que con una inversión de 20 millones de euros, contará con 28.000 metros cuadrados y una capacidad de almacenamiento de 650.000 neumáticos y 25 muelles de carga y descarga en lo que es “una apuesta clara por la Industria 4.0, la innovación con la robotización del proceso logístico y una notable agilización del trabajo y el flujo de pedidos”, comenta el presidente del Grupo Andrés, que hace hincapié en lo decisivo de este nuevo reto, ya que la operativa diaria de la empresa se coordina en la sede de Salamanca, desde donde parten cada hora vehículos de reparto para que, en un plazo máximo de 12-24 horas, se distribuyan a sus clientes. Para ello, a diario entran y salen más de 30.000 neumáticos en los almacenes de esta compañía que distribuye 2,5 millones de neumáticos de más de 70 marcas. Además, supondrá un gran avance logístico por su dotación tecnológica 4.0 y por la funcionalidad del diseño arquitectónico con elevados estándares calidad en materia de respeto medioambiental, generación de energía solar y la adecuada integración y respeto por su entorno.
“Formamos parte de un sector muy dinámico y cambiante, por lo que estamos muy pendientes de los importantes cambios que se están produciendo”, explica Eustaquio Andrés Sánchez en referencia a los sistemas autónomos de conducción, nuevas formas de propiedad de los vehículos, el crecimiento de las grandes flotas, la nueva movilidad sostenible y los vehículos eléctricos. “Nuestro gran reto es anticiparnos a las implicaciones que eso tendrá en nuestro producto y nuestros clientes, los talleres. Adaptarse a esta realidad, que ya es presente, es determinante a la hora de decidir el camino a seguir”, apunta el empresario salmantino, que comenta que el reto está en que todas estas novedades contribuyan al mantenimiento e impulso de los más de 20.000 clientes profesionales “que hoy en día confían en nosotros”.
Innovación e intución
El presidente del Grupo Andrés considera crucial trabajar continuamente con la innovación, “no conformarte con lo que sabes o te da seguridad, sino buscar la forma de mejorar, avanzar y actualizarse permanentemente. El ritmo que marca la tecnología, por ejemplo, es frenético y está en cada paso que damos. Hay que estar preparado y ser permeable. También creo que es importante fortalecer la red de alianzas empresariales, diversificar y eliminar fronteras. El riesgo es ineludible, está ahí, en el ADN de Grupo Andrés, y creo que nos impulsa”, concluye el empresario, que reconoce que siempre se ha dejado llevar por su intuición, observando el mercado y escuchando a los clientes.
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