El frenazo del consumo llevó a la economía española a registrar una tasa de variación intertrimestral nula entre julio y septiembre de 2011, frente al avance del 0,2% del trimestre anterior. No obstante, el PIB español creció un 0,8% en tasa interanual, igual que en los 3 meses anteriores, según los datos de Contabilidad Nacional, con la nueva base 2008, publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según el organismo, este estancamiento fue consecuencia del retroceso experimentado por el consumo familiar (1 décima menos) y de las instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares (1%) frente al repunte que experimentaron en el trimestre anterior.
Por su parte, las administraciones públicas también recortaron sus gasto en consumo entre julio y septiembre, aunque algo menos que en el segundo trimestre (-1,1% frente a -1,3%). La inversión, por su lado, también se contrajo un 0,6%, la mitad de lo que retrocedió en el segundo trimestre (-1,2%).
Comparación con 2010
En tasa interanual, la economía española logró mantener una tasa de crecimiento del 0,8% gracias a un comportamiento más favorable del gasto en consumo de los hogares, que mejoró 7 décimas su crecimiento, desde el -0,3% al 0,4%, pese a que la remuneración de los asalariados presentó un crecimiento más negativo que en el trimestre anterior (del -0,5% al -1,2%). El consumo de servicios se muestra más dinámico que el de bienes, especialmente que el de bienes duraderos, que prosigue con tasas negativas superiores al 10%.
Frente al mejor comportamiento del consumo familiar, el gasto en consumo final de las administraciones públicas empeoró 6 décimas, desde una tasa interanual del -1,7% en el segundo trimestre al -2,3% del tercero.
Menos demanda externa
Por otro lado, la contribución de la demanda exterior neta de la economía al PIB se redujo 5 décimas en el tercer trimestre, al pasar de 2,5 puntos a 2 puntos. Este resultado se debe a la desaceleración de las exportaciones (6 décimas menos) en contraste con el repunte positivo experimentado por las importaciones (8 décimas).
Destrucción de empleo
El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, descendió a un ritmo del 1,9%, 8 décimas más que en el segundo trimestre del año, lo que supone una reducción neta de casi 327.000 puestos de trabajo en un año.
Por ramas de actividad, la construcción perdió más de 222.000 empleos, la industria casi 40.000, los servicios cerca de 44.000 y las ramas primarias 21.000 puestos de trabajo a tiempo completo.
Europa Press / Castilla y León Económica