El Grupo Renault está inmerso desde hace más de 10 años en el desarrollo de la movilidad eléctrica a gran escala. Pionero en Europa, anunció en 2009 la comercialización de una gama completa compuesta por 4 vehículos asequibles 100% eléctricos para antes de 2012, un reto que ha cumplido. Desde entonces, ha seguido renovando su oferta y la ha enriquecido con nuevos modelos eléctricos y modelos electrificados, tanto híbridos como híbridos enchufables. De aquí a 2022, su gama contará con 8 modelos 100% eléctricos y 12 modelos electrificados.
El objetivo de la compañía es ofrecer la movilidad eléctrica al alcance de todos según las necesidades de cada uno. Esta estrategia se inscribe plenamente en el ADN de la marca del rombo, que sitúa al ser humano en el centro de todas sus innovaciones, según destacan en la empresa.
Hacer la vida más agradable
Conectado con sus usuarios, el vehículo eléctrico lo tiene todo para simplificar la vida y hacerla más agradable, tanto en el interior como en el exterior del coche. Conectado a la red eléctrica y sin emisiones en el uso, es un eslabón indispensable de la transición energética y de la mejora de la calidad del aire. A esto hay que sumar el placer que proporciona su incomparable fluidez y silencio de conducción y su coste de uso reducido.
El Grupo Renault cuenta con una década de experiencia en el diseño, la fabricación, la venta y la posventa de vehículos eléctricos. En la actualidad, más de 30.000 empleados de la marca en el mundo reciben formación sobre las especificidades del eléctrico, incluida toda la red comercial europea.
Gama completa
Año tras año, los vehículos eléctricos de Renault siguen siendo los más presentes en las carreteras de Europa, con más de un 20% de los vehículos eléctricos en circulación en todo el territorio pues ya ha vendido más de 300.000 unidades de estos modelos. En la actualidad, la gama del Grupo Renault abarca el coche urbano polivalente ZOE, la furgoneta Kangoo Z.E. y el furgón Master Z.E., también disponibles en versión Hidrógeno; el cuadriciclo Twizy; además, específicamente para Corea, la berlina RSM SM3 Z.E., y para China el mini-SUV Renault City K-Z.E.
La compañía enriquecerá su gama próximamente para responder aún mejor a las necesidades frente a las crecientes restricciones de circulación en las ciudades. El pequeño coche urbano Twingo Z.E. se comercializará de aquí a finales de 2020 y el Dacia Spring Electric Showcar prefigura el vehículo eléctrico más asequible del mercado, que se lanzará en 2021.
Además, para permitir que un público amplio se familiarice con la conducción eléctrica y valore todas sus virtudes, la marca del rombo propone una oferta complementaria a su gama 100% eléctrica. Por eso, ha desarrollado unas motorizaciones electrificadas en sus modelos más demandados que se comercializan este año: la versión híbrida de Clio -denominada E-TECH– ofrece hasta el 80% del tiempo de circulación urbana en modo eléctrico; y las versiones híbridas enchufables de Captur y Mégane –denominadas –E-TECH Híbrido Enchufable– permiten recorrer hasta 65 kilómetros en modo eléctrico en ciclo WLTP Urbano.
Múltiples ventajas
El vehículo eléctrico posee múltiples ventajas que lo convierten en muchos aspectos en el vehículo personal ideal y también en el coche compartido idóneo. Así lo ha entendido Renault ya que cerca de 8.000 vehículos eléctricos de la marca están diariamente disponibles en carsharing en una veintena de ciudades europeas, lo que lo convierte en el líder del sector. La compañía impulsa todas las nuevas formas de movilidad gracias a unas soluciones desarrolladas internamente o con socios locales, como servicios de alquiler de corta duración en autoservicio o de carsharing en flotas libres como el servicio Zity, muy valorado en Madrid y que ahora llega a París.
El Grupo Renault fue el primero en creer en la movilidad 100% eléctrica. Para responder mejor a las expectativas, mejora constantemente su oferta con vehículos con mayor autonomía, servicios conectados que facilitan la recarga y los trayectos, un diseño high-tech y motorizaciones dinámicas. Estos últimos años lanzó por ejemplo la segunda generación de sus best-sellers comerciales Kangoo Z.E. y Master Z.E. y la tercera de su modelo emblemático ZOE.
Plataforma ‘CMF-EV’
Asimismo, Renault abre el camino a la movilidad del futuro, que será conectada, incluso autónoma, y claramente eléctrica. Su última innovación importante en este ámbito es la puesta a punto de la plataforma CMF-EV (Common Module Family for Electric Vehicles), dentro de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, revelada por el prototipo MORPHOZ. Original y exclusivamente diseñada para una conducción 100% eléctrica, esta nueva plataforma amplía las fronteras de la modularidad pues permitirá lanzar varios vehículos con usos y tamaños variados, gracias sobre todo a la posibilidad de implantar baterías de distintos tamaños y a diferentes alturas.
Después de contribuir, dentro de la Alianza a la inversión de 4.000 millones de euros desde el inicio de la aventura del vehículo eléctrico, Renault anunció 1.000 millones de euros adicionales a mediados de 2018. Esta inversión está específicamente destinada a Francia, principal escenario de su saber hacer eléctrico, donde se diseñan los modelos eléctricos históricos y se fabrican Kangoo Z.E., Master Z.E., ZOE, sus motores eléctricos y las principales piezas mecánicas. En cuanto a China, el mayor mercado del vehículo eléctrico del mundo, Renault centra allí su presencia a través de 2 empresas conjuntas para proponer una gama específica.
Las energías renovables, cuya participación en el mix energético mundial aumenta de manera constante, alimentan los vehículos eléctricos con una electricidad baja en carbono. Ahora bien, estas fuentes a menudo son intermitentes, como la solar o la eólica, mientras que la producción y el consumo de energía deben poder coincidir en tiempo real. Afortunadamente, las baterías de los vehículos eléctricos representan una capacidad de almacenamiento energético permanentemente disponible en distintos lugares del territorio.
Redes eléctricas inteligentes
Gracias a la posibilidad de programar su recarga y a la recarga inteligente, los vehículos eléctricos Renault se cargan en el momento en que la electricidad está más disponible. Con la emergencia de las smart grids (redes eléctricas inteligentes), su recarga bi-direccional permitirá, además, reinyectar corriente en la red en caso de fuerte demanda. Por último, después de una primera vida en el automóvil, las baterías de los vehículos eléctricos Renault son aún suficientemente eficaces para servir de unidad de almacenamiento, de forma estacionaria como para electrificar algunos medios de transporte.
Hacia territorios inteligentes
A escala de un barrio, una ciudad o una isla, se están implementando verdaderos ecosistemas para gestionar de manera inteligente los circuitos energéticos y los desplazamientos, con Renault a la vanguardia de estas iniciativas. Gracias a múltiples colaboraciones operativas con colectividades locales, suministradores de energía, instaladores y especialistas del intercambio de datos, la marca del rombo propone soluciones en las que el vehículo eléctrico es tanto el instrumento para una movilidad sin emisiones en el uso, generalmente compartido, como la herramienta de almacenamiento de una electricidad verde. Es el caso del eco-barrio de Utrecht en Holanda, en la isla de Porto Santo en Portugal y muy pronto en Belle-Île-en-Mer en Bretaña (Francia).
Conducción autónoma
Para ir aún más lejos, de la conectividad del vehículo con infraestructuras y con los usuarios a su conducción autónoma solo hay un paso. Así, el Grupo Renault ya está probando versiones autónomas de sus vehículos eléctricos en el área metropolitana de la ciudad normanda de Ruan (Francia), así como en el campus de Saclay en la región parisina.
Más información en el número de octubre de la revista Castilla y León Económica