Ana Mato, ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, propondrá este miércoles a los consejeros de las comunidades autónomas el establecimiento del copago farmacéutico en función de la renta en lugar de por criterios de actividad laboral como sucede hasta ahora, por lo que los pensionistas pasarían a pagar el 10% de los fármacos, mientras que los trabajadores activos pagarían la mitad del precio de los medicamentos en lugar del 40% actual.
De este modo se descarta el copago de 1 euro por receta, que era la otra posibilidad que se barajaba siguiendo lo establecido por el Gobierno catalán, según explican fuentes del consejo consultivo del Sistema Nacional de Salud.
De momento, el Ejecutivo central ha descartado que los ciudadanos vayan a pagar por la asistencia sanitaria y ha precisado que la posible progresividad en función de la renta apuntada por Luis de Guindos, ministro de Economía y Competitividad, se está estudiando únicamente para los medicamentos.
Europa Press