Tras la crisis sanitaria y económica provocada por el coronavirus, el año 2022 también ha sido complicado para las empresas por efectos como el alza de los costes energéticos y de las materias primas, la elevada inflación o la subida de los tipos de interés, entre otros. Según el sondeo publicado por la revista Castilla y León Económica en el número de enero elaborado en exclusiva por Madison, mientras que el 45% de los empresarios afirma que incrementa su facturación en 2022, frente al 34,5% que la mantiene y sólo el 19% señala que reduce sus ventas; los beneficios únicamente aumentan en el 21,6% de los encuestados, se mantienen en el 32,7% de los casos y se reducen hasta casi en el 41% de los negocios. De las empresas que exportan, sólo el 42,7% ha aumentado sus ventas exteriores y las han disminuido el 18%, mientras que el resto las ha mantenido estables.
Creación de empleo
Respecto a las plantillas, el 29,5% de los empresarios contesta que ha aumentado sus recursos humanos, el 58% los ha mantenido y sólo el 11% ha reducido el número de trabajadores. En cuanto a las inversiones, aumentaron en el 33,5% de los negocios, se mantuvieron en el 39,5% de los casos y sólo se redujeron en el 20,5% de las compañías.
Principales problemas
Preguntados por el problema que más les preocupa para el desarrollo de los negocios, el 16,9% de los empresarios señala la subida de los precios y el 14,8% la inestable situación política y económica. Otros aspectos que alarman son el aumento de los costes (13,1%), la falta de empleados cualificados (5,1%), la falta de ayudas y apoyo a las empresas (4,7%), los impuestos, la financiación y la incertidumbre en los mercados, los tres con el 4,2%.
Castilla y León Económica
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