Caja España Duero cambiará su marca comercial, que pasará a denominarse EspañaDuero. Se trata de una nueva identidad corporativa que continúa el legado de las 2 entidades que conformaron en 2010 la actual.
La nueva imagen empezará a aparecer paulatinamente en los escaparates de su oficinas, cajeros autómaticos, papelería, libretas de ahorro, tarjetas de crédito, campañas publicitarias, así como en su web. La entidad ha decidido adaptar su marca actual de una forma continuista, e integrar las distintas denominaciones procedentes de las anteriores Caja España y Caja Duero que se han venido utilizando hasta ahora, sumando además la imagen del Grupo Unicaja Banco, al que pertenece como filial desde marzo de 2014.
Los diferentes estudios y análisis realizados han avalado el arraigo existente hacia las denominaciones España y Duero en sus principales zonas de actuación. Según se indica desde el banco, “prescindir de estas marcas habría supuesto la pérdida de un activo importante, dada la identificación, cercanía y apego con las mismas. No sólo en los clientes sino en el conjunto de la sociedad de Castilla y León, preferentemente. En esos territorios han realizado una labor impagable en el ámbito financiero, e infinidad de actuaciones sociales y culturales”.
Atributos y valores
El nuevo logotipo une en una sola palabra los anteriores nombres, creando la nueva marca comercial EspañaDuero. La enseña prescinde de la denominación Caja, puesto que la entidad pasó a operar como banco en diciembre de 2011, siguiendo la normativa vigente.
La denominación EspañaDuero irá acompañada de un elemento gráfico, como es una cabeza de toro y el trazo de una ola, que hasta ahora acompañaban a los anteriores logotipos. Los colores corporativos elegidos son 2 gamas de verdes, uno de ellos correspondiente al utilizado por el Grupo Unicaja Banco.
Los atributos de la marca elegida que definen su personalidad son 4: la integración de las 2 entidades originarias y su pertenencia al Grupo Unicaja; la solidez financiera, que genera confianza y absoluta seguridad; el arraigo y compromiso histórico con sus clientes y con los territorios de origen, Castilla y León y el norte de Extremadura, así como Madrid; su flexibilidad ante un cambiante mercado financiero, que apuesta por la tecnología como nueva forma de hacer banca; y la profesionalidad, que implica una imagen de responsabilidad, conocimiento, capacidad, servicio, y productos interesantes para los clientes, sin olvidar unos estrictos valores éticos.
Los clientes podrán comprobar también los próximos meses las ventajas de la integración informática, pudiendo operar de forma indistinta en cualquiera de sus oficinas.
Castilla y León Económica