Banca Cívica y CaixaBank han alcanzado un acuerdo laboral por el que se garantizan las retribuciones actuales fijas anuales de los empleados de la primera entidad tras su integración en el banco catalán y que contempla medidas de movilidad geográfica.
El pacto prevé también una progresiva homologación de los trabajadores de Banca Cívica a las condiciones vigentes en Caixabank “con el objetivo de garantizar la calidad de servicio a los clientes de ambas entidades”.
Plena integración
En ese proceso se incluye la homologación salarial de los empleados de la agrupación donde se integra Caja de Burgos “de forma progresiva durante 60 meses desde la fecha efectiva de la integración”.
La armonización de las aportaciones a los planes de pensiones de empleados a las condiciones de CaixaBank también se homologará de forma progresiva durante el mismo período.
El resto de beneficios sociales de la entidad catalana se aplicarán de forma inmediata, una vez salvados los períodos de moratoria para respetar algunos beneficios previos.
Europa Press / Castilla y León Económica