BBVA Research prevé que la economía regional cierre el año con un crecimiento del 2,6% que se elevará hasta el 2,8% en 2016, según se recoge en el informe Situación Castilla y León presentado este martes en Burgos. Esta evolución favorable sostenida está condicionada por factores tanto externos como internos, como el “brusco” descenso del precio del petróleo, la depreciación del euro y la política monetaria expansiva en Europa, así como por una mayor aportación de la demanda interna.
“Creemos que este año se van a mantener los signos de mejora del mercado laboral que comenzaron en 2014, tras terminar el ejercicio con un crecimiento anual del 0,4% tanto en el número de afiliaciones a la Seguridad Social como en el de ocupados. La buena evolución del empleo se ha traducido en una reducción de la tasa de paro de un punto porcentual hasta el 20,8% en el promedio de 2014”, destacó Rafael Doménech, economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, quien señaló que el número de ocupados aumentará un 3,7% hasta el final de 2016, lo que se traducirá en la generación de 34.000 puestos de trabajo en la comunidad autónoma. Al respecto, apuntó que uno de los retos de Castilla y León será revertir el saldo migratorio negativo que se mantiene desde el inicio de la crisis.
Consumo de los hogares
En su intervención, Doménech indicó la tendencia favorable del consumo de los hogares que, “apoyado en la mejora de la percepción de la situación económica, se refleja en un incremento de las matriculaciones de vehículos del 22,2% durante el pasado ejercicio”. Asimismo, advirtió de que el cumplimiento del objetivo de estabilidad para 2015, fijado en el -0,7%, requerirá “una ejecución presupuestaria rigurosa”.
Por su parte, Juan Carlos Hidalgo, director de la Territorial Noroeste de BBVA, aseguró que su banco “antes, durante y después de la crisis ha prestado financiación a empresas y familias, sin embargo, el problema actual no es de falta de crédito, sino de que no existe suficiente demanda”.
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