Avícola Galocha ha invertido alrededor de 11 millones de euros en ampliar sus instalaciones y dotarlas de la última tecnología, lo que le va a permitir duplicar su capacidad de producción al pasar de las 4.000 aves a la hora a llegar hasta las 9.000. Con esta actuación, la empresa familiar zamorana pretende expandir su clientela en Europa al crear nuevos partners gracias a su buena sintonía con 1 de sus principales clientes, Auden Foods (recientemente adquirido por GoodLife Foods), “lo que da lugar a la apertura de nuevas ventanas de venta por todo el continente”.
Así, ha incorporado una línea de frío dinámico, lo que agiliza los tiempos de espera del pollo canal previos al despiece, un área donde se está llevando a cabo una optimización de los espacios de producción con la incorporación de maquinaria de última generación que mejorará los procesos y de nuevas cámaras de conservación de producto terminado. En este espacio, separado de otras etapas y completamente higienizado, se debe tener un control de temperatura para estar entre 1ºC y 4ºC y una limpieza constante. En la actualidad, el tiempo de espera para que el pollo llegue a estas temperaturas es de 15 horas, ya que es de manera estática (en cajas). Con el nuevo tipo de enfriamiento dinámico, en tres horas y media o cuatro se pueden alcanzar esos valores, lo que favorece la operativa diaria, también en la sala de sacrificio.
Innovación
Para la compañía, que facturó 37 millones el año pasado y prevé cerrar 2024 con 41 millones, “la innovación es crucial para mejorar la eficiencia, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad. La incorporación de tecnologías automatizadas permite aumentar la velocidad de producción y reducir errores, de esta manera priorizamos la calidad y controlamos defectos en los productos de forma temprana, asegurando que llegan al consumidor con los estándares de calidad y seguridad alimentaria. La automatización y la implantación de sistemas de seguridad reducen el riesgo de accidentes a nuestros trabajadores, algo especialmente importante en la industria del procesamiento de carnes, donde existen numerosos riesgos ”, aseguran Fernando y Maite Galocha, consejeros delegados de esta empresa que da empleo a 220 personas.
Avícola Galocha centra su cartera de clientes en el mercado mayorista de pollo. “Al mismo tiempo, a pesar del cambio de filosofía de venta de la última década, mantenemos el abastecimiento a empresas históricas de nuestra área de influencia, como es Zamora, Salamanca, Asturias y Portugal”, puntualizan.
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