Tras el A3 e-tron, el nuevo Q7 es el segundo Audi que incorpora una versión híbrida enchufable en la corriente, y que se pondrá a la venta en marzo de 2016. Lleva el experimentado V6 3.0 TDI en su variante de 258 CV asociado a un motor eléctrico de 94 kW situado en la caja de cambios. La potencia combinada es de 373 CV y el par máximo de 700 Nm. Las baterías están alojadas por encima del eje trasero y el maletero pierde el espacio bajo el suelo del mismo así como la tercera fila de asientos. Frente a los 890 litros de maletero dispone de 650 litros, que tampoco es una cifra desdeñable.
Sentados ante el volante pocos elementos nos muestran la naturaleza de su mecánica, salvo la instrumentación específica: nos encontramos la muy lograda pantalla LCD/TFT del Virtual Cockpit, cuyo cuentavueltas se ha sustituido por un testigo de utilización o de regeneración de energía, y un botón EV (para activar el funcionamiento sólo en eléctrico) en el salpicadero. También hay menús exclusivos en la pantalla de la parte central del salpicadero, como estadísticas de consumo o la programación de la carga de la batería. El Drive Select anuncia igualmente los modos de conducción.
El modo EV es solo propulsión eléctrica y el hybrid gestiona de forma óptima la combinación de los motores eléctrico y diésel. Este modo se apoya también sobre los datos del GPS: se programa una ruta en el navegador y el coche gestiona la energía previendo lo que va a suceder para optimizar el consumo. Si no se ha programado ninguna ruta, el coche realiza una estimación sobre los 3 kilómetros siguientes del viaje, desde el punto en que se encuentra. Como en el resto de la gama del nuevo Q7, también en este e-tron al aproximarnos a poblaciones o intersecciones y nos recomienda que levantemos el pie del acelerador e incluso puede producir una pulsación sobre el propio pedal a modo de aviso.
Cuando el cambio de marchas funciona en posición D y el conductor levanta el pie del acelerador, el Audi Q7 e-tron Quattro circula por inercia, a vela, desactivándose el motor diésel y el eléctrico. Y hay otros 2 modos de gestión de energía: battery charge permite recargar la batería utilizando como fuente de alimentación el motor y con el battery hold se puede conservar la energía para poder circular posteriormente sólo en eléctrico, por ejemplo en una zona de tráfico restringido.
1.400 kilómetros sin repostar
Los 45 kilómetros recorridos sólo en eléctrico son una cifra real que hemos podido constatar así como la velocidad máxima de 125 km/h que en este modo se alcanza. Evidentemente, la cifra fantástica de 1,7 litros homologada es teórica en uso real. Con el Q7 e-tron podemos recorrer más de 1.400 kilómetros antes de entrar a una gasolinera.
El perfecto compromiso entre prestaciones y sobriedad es el sello de identidad de este Q7 e-tron. El híbrido enchufable en una toma doméstica se carga en 8 horas, tiempo que se reduce a solamente 2,30 horas con una wallbox.
Santiago de Garnica