Antolin, proveedor global de soluciones tecnológicas para el interior del automóvil, mantuvo la mejora de sus márgenes en los 9 primeros meses del año, pese a un entorno cada vez más desafiante y volátil en el que el sector ha experimentado una caída generalizada de sus ventas. La compañía registró un aumento del 6,6% del beneficio operativo bruto (ebitda), hasta 265,4 millones de euros, gracias a la mejora de la eficiencia y a un estricto control de los costes impuesto por el Plan de Transformación, que permitieron compensar la reducción de las ventas. El beneficio de explotación (ebit) creció un 25%, hasta 88,3 millones de euros.
Las ventas se redujeron un 10,2%, hasta 3.174,7 millones de euros, marcadas por el aumento de la incertidumbre en el sector del automóvil. La producción de vehículos a nivel mundial comenzó el año en una situación de atonía, y ha evolucionado a la baja con el paso de los meses.
Tercer trimestre
Así, el tercer trimestre cerró con una caída del 4,9% en comparación con el mismo trimestre de 2023, hasta 21,5 millones de vehículos producidos a nivel mundial, según datos de S&P Mobility. De cara a adaptar las previsiones al endurecimiento del mercado, Antolin ha decidido revisar a la baja sus previsiones de ventas para 2024, hasta el entorno de 4.200 millones de euros.
Pese a este entorno, Antolin registró en el tercer trimestre del año un nuevo aumento en márgenes, clave para asegurar la fortaleza financiera de la compañía. El margen ebitda se situó en un 8,4%, medio punto porcentual más que en el mismo periodo del año anterior, avanzando así en el objetivo de alcanzar un margen de doble dígito a medio plazo. Por otro lado, el margen del beneficio de explotación (ebit) fue del 2,7%, 0,2 puntos más.
Análisis por regiones
El análisis en términos de ventas por regiones desvela la pujanza del mercado asiático, que crece un 4% en los 9 primeros meses, hasta 589 millones de euros, liderado por India. En Europa y el resto del mundo las ventas bajan el 12%, hasta 1.546 millones de euros, afectadas en el último trimestre por la venta de Ebergassing y el fin de la producción de proyectos en el Reino Unido. En Norteamérica, las ventas ascienden a 1.038 millones, el 14% menos, debido a un menor volumen de los pedidos de los principales clientes y al fin de proyectos de producción.
De cara a los próximos meses, sin embargo, se espera que el mercado estadounidense vuelva a ganar protagonismo en la actividad de la compañía burgalesa, coincidiendo con la puesta en marcha de nuevos proyectos.
Soluciones tecnológicas diferenciales
Como parte de su plan de transformación, Antolin ha puesto el objetivo en ofrecer productos de alto valor añadido y que integren las capacidades de la compañía en electrónica, iluminación y sistemas HMI. Esto se ha traducido en una importante cartera de nuevos proyectos que impulsarán el crecimiento rentable, especialmente en Norteamérica. De hecho, el área de soluciones tecnológicas ha registrado un crecimiento superior a la media en varios mercados, como México (+24%), Alemania (+17%) y Francia (+13%).
El objetivo de cara a los próximos meses es que el programa de transformación siga impulsando la mejora de márgenes para compensar el impacto de la disminución de ingresos que implica un contexto como el actual, además de preparar a la compañía para el momento en que el mercado vuelva a crecer con solidez. En los primeros 9 meses, Antolin alcanzó acuerdos por desinversiones por valor de 119 millones de euros, lo que supone cerca del 80% del objetivo anunciado en su plan de desinversiones y que ascendía a 150 millones entre 2024 y 2025. Este programa de desinversión persigue fortalecer el balance y adaptar la presencia geográfica de la compañía a la nueva realidad del mercado.
Además, tras el acuerdo cerrado en verano con sus bancos para extender el vencimiento de su crédito sindicado de más de 500 millones de euros y la emisión de bonos por valor de 250 millones de euros, Antolin no tiene vencimientos significativos de deuda hasta 2028.
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