Siempre es una gran noticia que una empresa asentada en Castilla y León se encuentre entre las elegidas para acometer proyectos punteros a nivel mundial. En este caso hablamos de Ficosterra, compañía de biotecnología marina que fabrica en Burgos y Ensenada (México) bioestimulantes y biofertilizantes, que ha sido la única empresa española seleccionada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDP) para impulsar el cumplimiento del Objetivo 14 de Desarrollo Sostenible (ODS), cuya misión es conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos. Sólo 9 empresas en todo el mundo han sido elegidas tras un largo proceso de selección para desarrollar proyectos que ayuden en el cumplimiento de estos objetivos.
Solución 100% organíca y sostenible
Ficosterra es una empresa de biotecnología marina constituida en 2016 de la mano de un proyecto de investigación de la multinacional española Hispanagar, que fabrica bioestimulantes y biofertilizantes de extractos de algas y microorganismos para favorecer el máximo desarrollo de cultivos y plantas. Estos productos son una solución 100% orgánica, sostenible y respetuosa con el medio ambiente que ayuda a reducir el empleo de agroquímicos y contribuye a mejorar la productividad de la agricultura.
Una de las consecuencias del abuso de los fertilizantes de origen mineral es la acidificación y eutrofización (contaminación de las aguas provocada por el uso de sustancias químicas) de mares y océanos, que reciben, procedentes de los ríos, los restos de fósforo y nitrógeno no asimilados por los cultivos.
Las cargas de contaminación de estos compuestos de origen mineral se han triplicado desde la época preindustrial. Según los datos que maneja UNDP, cada año llegan hasta los mares y océanos cerca de trece millones de toneladas, que están provocando un crecimiento exponencial de la eutrofización y la configuración de áreas cada vez mas amplias con falta de oxígeno.
Reducción del uso de agroquímicos
La utilización de bioestimulantes y biofertilizantes de extractos de algas y microorganismos permite reducir sensiblemente el uso de agroquímicos, sin mermar la productividad de las cosechas, además de devolver al mar lo que sale de él, un valor ponderado hoy por la economía circular.
El reto que Ficosterra está abordando en centros de investigación de la Universidad Hassan II de Marruecos y en el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), de México, es demostrar que el uso de sus bioestimulantes reduce sensiblemente el uso de fertilizantes de origen mineral, con la consiguiente reducción de la carga de nitrógeno y fósforo que se filtra hacia los mares. Además, en la firma aseguran que sus productos son capaces de aumentar la productividad de las cosechas entre un 6% y un 15%, según el tipo de cultivo.
Ensayos con equipo multidisciplinar
Los ensayos iniciados en 2021 están dirigidos por un equipo multidisciplinar de ingenieros agrónomos y biólogos de Ficosterra y de los centros de investigación marroquí y mexicano, en dos escenarios distintos: laboratorio y campo. Ficosterra pretende acercar estos ensayos al escenario real, en el que el agricultor desarrolla su trabajo día a día y que pretenden definir la nueva agricultura del siglo XXI.
UNDP puso en marcha en 2020 el programa Ocean Innovation Challenge, una iniciativa ideada para acelerar el progreso en el ODS14, mediante la identificación de proyectos públicos o privados, innovadores, replicables y escalables que promuevan la restauración y protección de los océanos y las costas para proteger e impulsar la llamada economía azul.
Más información en el número de abril de la revista Castilla y León Económica