La Junta se compromete a cambiar la orientación de los itinerarios formativos y políticas activas de empleo en consenso con el Diálogo Social para mejorar la empleabilidad, de acuerdo con las conclusiones derivadas de la evaluación que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) realizó al Servicio Público de Empleo (Ecyl) y que presentaron este miércoles Francisco Igea, vicepresidente y portavoz de la Junta; Ana Carlota Amigo, consejera de Empleo e Industria; y Carlos Fernández Carriedo, consejero de Economía y Hacienda.
“Se trata de un análisis constructivo con el objetivo de saber en qué aspectos podemos mejorar desde una óptica independiente y ajena”, resumió Amigo, que agradeció la colaboración “valiente y estrecha” de los trabajadores del Ecyl por someterse a la evaluación.
Programas evaluados
En concreto, la Airef evaluó 4 programas, de los que los 2 primeros son los principales en materia de formación para desempleados de la comunidad autónoma: Formación para Desempleados (FOD) e Itinerarios de Orientación, Formación e Inserción (OFI). Los otros 2, el programa de Contratación de Desempleados de la Minería por Entidades Locales (ELMIN) y el de Contratación por Instituciones sin Ánimo de Lucro (PRORGAN), son de una dimensión más reducida que se enmarcan en el ámbito de las políticas de creación directa de empleo.
En este sentido, la evaluación identificó que los programas de formación analizados incrementan la empleabilidad de sus participantes entre “5 y 10 puntos porcentuales“, pero los efectos se “diluyen” en el medio plazo y dependen de la familia formativa. Además, el análisis encuentra que los efectos anteriores aumentan “entre 10 y 15 puntos porcentuales” en el corto plazo cuando los cursos se acompañan de acciones de orientación e inserción, aunque no se reflejan mejoras en la calidad del empleo.
Por otro lado, constata que la contratación directa de desempleados de la minería no tiene beneficios sobre la empleabilidad posterior de las personas contratadas.
Orientación a resultados
De forma adicional, el estudio identifica una “escasa” orientación de las políticas a resultados, una ausencia de diagnóstico y tratamiento individualizado y una importante falta de recursos para llevar a cabo el seguimiento y evaluación sistemáticos de los resultados de los programas, a pesar del elevado volumen de información del que dispone el Ecyl.
“La Airef detecta que el modelo de gestión conlleva una alta carga administrativa que conduce a programas generalistas fragmentados según la fuente de financiación, lo que origina solapamientos de programas entre los que se aprecia muy poca coordinación”, apunta el estudio.
Para superar estas limitaciones, el estudio apunta a que se ha de realizar un esfuerzo en 2 niveles. Por un lado, es necesario que el Gobierno central aborde las pertinentes reformas estructurales, al tiempo que se simplifican los procedimientos, se potencian las capacidades de orientación e intermediación de los servicios públicos de empleo y se desarrollan herramientas de diagnóstico avanzadas.
Por otro, se propone a la Junta de Castilla y León que aumente los recursos técnicos y humanos dedicados a la planificación, seguimiento y evaluación de los programas, especialmente con la creación de una unidad interna de seguimiento, con independencia de las evaluaciones ex-post y de medio plazo realizadas por instituciones independientes como la Airef.
Propuestas generales
El estudio permite formular una serie de propuestas generales para mejorar la eficacia de las políticas activas de empleo en Castilla y León.
En este sentido, la Airef propone avanzar hacia un modelo de prestación de servicios más flexible, que permita ofrecer una atención integral a los usuarios mejorando la coordinación entre los programas. Asimismo, “cuando resulte adecuado”, propone realizar proyectos piloto que permitan estimar el impacto de los programas antes de ponerlos en marcha.
Otro de los puntos que el estudio recoge es la necesidad de reforzar la capacidad de orientación e intermediación de los servicios públicos de empleo, incorporando personal propio que permita llevar a cabo las acciones de orientación y acompañamiento a los desempleados.
Por último, propone impulsar el desarrollo de una herramienta de diagnóstico que incorpore toda la información de carácter sociodemográfico, de nivel de formación y la relacionada con el ámbito laboral en poder de las administraciones públicas, así como explotar el elevado volumen de información al que tiene acceso el Ecyl para establecer objetivos medibles y construir un sistema de seguimiento y evaluación estructurado y orientado al análisis de resultados.
Entre las características de ese sistema, la Airef propone que incluya objetivos definidos, indicadores de contexto, de ejecución y de impacto, y que se acompañe de medios técnicos suficientes, personal estable y con perfiles analíticos, idealmente mediante la creación de una unidad de planificación y evaluación en el seno del Ecyl.
Castilla y León Económica / Europa Press