Pilar del Olmo, consejera de Hacienda de la Junta de Castilla y León, subrayó la confianza del Gobierno central en las posibilidades de la región para cumplir el objetivo de déficit a finales de año (1,3% sobre el PIB), si bien reconoció que esta reducción “no se logrará sin esfuerzos”.
La representante de las cuentas públicas de la comunidad autónoma se reunió con el equipo del Ministerio de Economía y Hacienda para repasar los datos sobre el déficit regional -1,1% en el primer semestre del año según los últimos datos publicados-, y se comprometió a aprobar “lo antes que podamos” -a finales de septiembre o primeros de octubre- un plan de ajuste financiero para racionalizar el gasto. Sin embargo admitió que, aunque podrá tener efectos en 2011, su aplicación real será entre los ejercicios 2012 y 2015.
Avances en los 211 millones del Fondo de Convergencia
Dicho esto, del Olmo aprovechó la ocasión para advertir de los “problemas de liquidez” que tienen las comunidades autónomas por las restricciones que imponen los mercados financieros, por lo que reclamó una vez más al Ejecutivo los 211 millones de euros que corresponden a la región como anticipo por los Fondos de Convergencia, un asunto en el que, por primera vez, “no se ha cerrado la puerta del todo”, lo que calificó de “un gran avance”.
No obstante, de no llegar ese dinero, la titular de Hacienda reconoció que Castilla y León tendrá problemas de liquidez antes de finalizar el año que se traducirían en “problemas de pago” para los conceptos que no sean indispensables e imprescindibles -entre los pagos imprescindibles citó los intereses de la deuda y el pago de créditos, las nóminas, la dependencia o el mantenimiento de centros-.
Europa Press