La Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) rebajó 1 décima su previsión de crecimiento de la economía española para 2014 hasta el 1,3%, aunque mantiene en el 2,2% el incremento del PIB estimado para 2015.
Funcas explica que ha revisado a la baja sus previsiones de este año por el menor crecimiento de lo esperado para el segundo semestre ante las dudas que arrojan algunas cifras, como la recuperación de los bienes de consumo duradero, especialmente los automóviles.
“No cabe esperar que este tipo de gasto siga creciendo a un ritmo tan intenso”, señaló Funcas, que indicó además que las condiciones de fondo no son consistentes con una recuperación autónoma del consumo si no existe otro motor que sostenga el crecimiento, porque no hay margen para que los hogares se endeuden más o reduzcan más su ahorro.
Asimismo, cree que hay dudas sobre la continuidad del vigor de la inversión en un contexto en el que las perspectivas de la recuperación mundial pueden no cumplirse.
A su parecer, el mayor riesgo está en la zona euro, porque si no remonta en los próximos trimestres, la recuperación de la economía española se vería “frenada”, lo que obligaría a reconsiderar las cifras de 2014 y 2015. Además, el déficit exterior por cuenta corriente se ampliaría, lo que implicaría nuevas incertidumbres sobre la sostenibilidad de la recuperación a medio plazo.
En este sentido, afirmó que la eficacia de las últimas medidas del Banco Central Europeo (BCE) será “limitada” si no se acompañan de cambios en la política fiscal y las reformas estructurales en el conjunto del área euro. Además, advierte de que sus efectos sobre la actividad económica pueden tardar muchos meses en sentirse.
Otro de los riesgos que ve Funcas procede del “imprevisible impacto” sobre los mercados financieros de la retirada de las medidas de expansión cuantitativa en Estados Unidos y el aumento de sus tipos de interés.
Según Funcas, algunos activos financieros pueden estar sobrevalorados por la abundancia de liquidez de los últimos años, por lo que la moderación de la misma podría provocar reajustes de precios y aumentos de la rentabilidad de la deuda.
Riesgos transitorios
Pese a todos estos riesgos, Funcas cree que algunos de estos factores se pueden considerar “transitorios” y que, por tanto, no afectarán al crecimiento de 2015, por lo que ha decidido mantener la previsión en el 2,2%. Además, considera que la mejora prevista de las condiciones financieras el año que viene y los efectos sobre el gasto de los hogares de la reforma fiscal auguran una aceleración del crecimiento el año que viene.
Funcas ha modificado la composición del PIB por la continuidad en el segundo trimestre del patrón desequilibrado de aportaciones de la demanda nacional y del sector exterior. En concreto, se han revisado al alza la aportación de la demanda interna y de las importaciones en 2014 y 2015 y se han rebajado las cifras de las exportaciones.
El consumo de los hogares crecerá un 2,1% este año y un 2,6% el próximo, algo más de lo previsto inicialmente por el mayor dinamismo en el segundo trimestre y la corrección al alza de la cifra del primer trimestre. Según Funcas, el crecimiento se apoyará en un ligero aumento de la renta disponible -por el aumento del empleo y de las rentas empresariales, junto al descenso de los pagos por intereses-, aunque también en la reducción del ahorro en el caso de 2014.
Consumo en 2015
En 2015, este componente de la demanda recibirá un impulso adicional derivado de la bajada del impuesto sobre la renta, que además permitirá una recuperación del ahorro. El consumo de las Administraciones Públicas, por su parte, aumentará un 0,2% este año y descenderá un 0,7% el próximo.
Funcas cree que la inversión en construcción “suavizará notablemente” su ritmo de caída hasta el 4% en 2014 y el 0,1% en 2015. En concreto, considera que el cambio de tendencia del mercado inmobiliario permitirá acelerar la absorción del stock de viviendas sin vender, lo que hará posible que la inversión en construcción residencial comience a crecer en la segunda mitad del próximo año, si bien, la evolución para el conjunto del ejercicio todavía será negativa. La inversión en bienes de equipo crecerá un 7,2% y un 6,6% en 2014 y 2015, respectivamente.
Las exportaciones de bienes y servicios crecerán un 4,4%, medio punto menos que antes, por la negativa evolución de la economía europea, mientras que en 2015 se incrementarán un 5,4%, sujeto a la condición de que la recuperación en el área gane fuerza en los próximos trimestres. La importaciones, por su parte, aumentarán un 5,5%, medio punto más. Para 2015 se mantiene un crecimiento del 5,3%.
Empleo
En este contexto, Funcas cree que la creación de empleo, en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, ascenderá al 0,7% este año y el 1,5% el próximo, una décima más de lo estimado anteriormente. La tasa de paro, por su parte, se situará en el 24,5% en 2014 y en el 22,5% en 2015, una décima menos. La reducción del desempleo también se deberá a la caída de la población activa.
Con este aumento del empleo, el incremento de la productividad se ralentizará “sensiblemente” y los costes laborales unitarios seguirán descendiendo a un ritmo “muy inferior” al observado en los últimos años, puesto que el crecimiento de los salarios seguirá siendo “muy contenido”.
Finalmente y como consecuencia del continuo deterioro del saldo exterior, Funcas prevé un déficit de la balanza por cuenta corriente del 0,3% del PIB tanto este año como el siguiente, frente a los superávits del 1,1% y 1,6% planteados en las previsiones anteriores.
El déficit público, por su parte, se reducirá este año hasta el 5,5% del PIB -el objetivo pactado con Bruselas- y hasta el 4,6% en 2015, algo por encima de lo acordado. El impacto favorable del ciclo y el menor gasto en intereses de la deuda pública permitirán esta moderación, junto al incremento del denominador de la ratio por el aumento del PIB nominal.
Castilla y León Económica / Europa Press