La división hotelera de Nueva Rumasa, que la familia Ruiz-Mateos ha puesto a la venta, tiene una deuda superior a 200 millones de euros, principalmente en créditos hipotecarios. Este importe supone casi un tercio de los 700 millones de euros que, según la compañía, suma el endeudamiento financiero total de todas las empresa del holding.
En concreto, los Ruiz-Mateos han puesto a la venta los 15 hoteles de España que integra bajo el grupo Hotasa, actualmente en fase preconcursal, con la intención de desprenderse de ellos en bloque, agrupados o de forma individual. La compañía ha contratado a la consultora internacional Christie+Co para asesorarle en la venta de dichos activos, 7 de ellos ubicados en Baleares, 6 en Canarias y 2 en Andalucía, con lo que Nueva Rumasa sólo se quedaría, en principio, con el complejo turístico que la familia posee en Santo Domingo (República Dominicana).
Precisamente, la familia Radó interpuso una demanda contra Nueva Rumasa por el impago de parte del importe de la venta de 2 de estos hoteles, uno Gran Canaria y otro en Mallorca, en 2008 (por 69 millones de euros), unos activos en los que los empresarios mallorquines contaban con una participación minoritaria, de aproximadamente el 18%.
Europa Press
