Un ejemplo reciente de la fuerza que tienen las redes sociales lo ha protagonizado Pablo Herreros con su blog comunicacionsellamaeljuego.com, cuando denunció que varias marcas de productos conocidos hacían publicidad en la emisión del programa La Noria mientras su presentador Jordi González entrevistaba a la madre de El Cuco, el menor imputado por la muerte de Marta del Castillo. La petición hecha por Herreros dirigida a las distintas compañías anunciantes de esa emisión fue respaldada a través de la comunidad online Actuable y avalada por 8.000 usuarios. La presión fue tal que la respuesta no se hizo esperar y marcas como Campofrío, Puleva y President, Bayer, Panrico, L’Oreal, Nestlé, Bayer y Vodafone decidieron retirar su publicidad del programa, lo que ha puesto en una situación delicada a este espacio y consecuentemente a Telecinco.
Cuando se analizan las redes sociales desde los medios tradicionales, en ocasiones se tiende a minimizar su poder, pero la situación que se ha producido en torno al programa La Noria hubiera sido impensable sin el posicionamiento de miles de ciudadanos anónimos que han utilizado el altavoz y la viralidad de estos nuevos vehículos de comunicación para hacer oír sus opiniones alto y claro.
Y de nuevo se ha vuelto a demostrar que el contenido que viaja a través de las redes sociales no es sólo aquel relacionado con el entretenimiento, el humor fácil y el ocio, si no que en muchos casos la denuncia de hechos inmorales o de falta de ética también pueden convertirse en los mensajes con mayores seguidores.
Libertad de expresión
El periodista Jordi González, desde el pedestal al que le ha aupado su amplia audiencia y con la ceguera de la vanidad, acusó a otros medios de comunicación y redes sociales de censurar lo que el entiende como libertad de expresión. Y digo yo: lo que han hecho los miles de ciudadanos anónimos que han suscrito la iniciativa no es igualmente ejercer el derecho a la libertad de expresión. Si uno realiza un trabajo público -y la emisión de un programa de TV lo es- está expuesto a las críticas y debe saber encajarlas.
Por otro lado, las propias marcas también han elegido dónde quieren destinar su inversión publicitaria y frente a la dictadura de la audiencia, se han decantado por la defensa de unos valores éticos que en muchos casos deberían ser intrínsecos a su filosofía empresarial y sus políticas de RSC.
Otra polémica
Otra polémica generada por el propio presentador de La Noria, cuando decidió responder al aluvión de críticas, ha girado en torno a si otros programas y cadenas también utilizaron a este personaje para entrevistas, cobradas y sin cobrar. Para mí, lo de menos es qué medio entrevistó a la madre de El Cuco, sino el objetivo que se buscaba con ese contenido.
Cuando se utiliza el dolor ajeno del asesinato de una adolescente -con la contestación social que ha tenido este caso- con la única finalidad de ofrecer carnaza y morbo y encima se intenta justificar con un objetivo periodístico, pues uno se expone a las críticas de los televidentes que rechazan estas prácticas poco éticas.
Cambio en la relación con el público
Este caso también refleja a la perfección el giro copernicano que se está experimentando en la relación entre los medios de comunicación tradicionales y el público. Antes el mensaje era unidireccional: el medio emitía contenidos y el lector/oyente/televidente los recibía, sin apenas poder emitir juicios o realizar críticas, salvo en el reducido y anquilosado espacio de las cartas al director. Ahora no, ahora la respuesta es inmediata y contundente. Hemos pasado de los medios de comunicación de masas a la masa de comunicadores, y eso es algo que todavía los medios deben aprender a manejar.
Por eso aplaudo, en primer lugar la actitud de los ciudadanos anónimos que se han sumado a la denuncia de esta situación aberrante; y, en segundo lugar, de las marcas que han apostado por desvincularse de unos contenidos y programas alejados casi siempre de los valores sociales que defienden.
De acuerdo en muchas cosas de las que dice, pero también creo que las marcas han hecho “lavado de imagen” en este caso. También en su día llevaron a Violeta Santander, por poner un ejemplo de persona igualmente abominable, y creo que no se montó tal escándalo. Un saludo
Buenos días,
Pienso como usted, es probable que algunas marcas hayan utilizado la coyuntura para hacer esa campaña de imagen que señala, pero si el revuelo que se ha montado sirve para que recapaciten a la hora de elegir los espacios a los que destinan su inversión publicitaria y toman una decisión que han hecho pública -y de qué manera-, pues creo que será irreversible un cambio de postura en su estrategia, porque si alguna vez dudan, ahí estarán esos ciudadanos anónimos para recordárselo y señalar su hipocresía.
Además, a mi modo de ver, pienso que esta polémica no sólo ha repercutido en las marcas que se han visto directamente afectadas, sino que tengo la esperanza de que servirá para que otros anunciantes reflexionen sobre este asunto, porque sus consumidores, que sienten la marca como propia, les están diciendo dónde no quieren verse involucrados.
Gracias por particiar en este blog.
Para hacerse una idea del poder de las redes sociales no hay más que seguir el debate en radio o tv pero acompañados de facebook o twitter. Y lo hago y casi son más interesantes las aportaciones anónimas que las que plantean Rajoy y Rubalcaba.
Buenos días,
No lo dudo. Otro día tengo que practicar ese interesante ejercicio, que seguro aportaba algo de frescura e ideas a posturas tan marcadas por el guión establecido, que se alejaban bastante de la imaginación, flexibilidad y creatividad que, a mi modo de ver, tiene que regir todo debate.
Gracias por tu aportación.
Buenos y soleados dias desde tierras de Castilla
Me encanta ver este tipo de articulos que hace que uno tenga un poco de…ESPERANZA en el genero humano
Gracias
Estimado Duque Cotilla:
Yo hoy también me he despertado con un halo de optimismo, presiento que algo tiene que ver el sol que también luce en esta parte de Castilla.
Pero te aseguro que comentarios como el tuyo también ayudan. Si he sido capaz de transmitir algo de esperanza en estos tiempos tan ásperos, pues me doy por satisfecha.
Muchas gracias.
Te doy la razón, estamos perdiendo el norte y como muy bien dices hablan de liberta de expresión pues ya la tienen.
Hola,
Siempre me he revelado ante el doble rasero para medir la libertad de expresión y creo que con la llegada de las redes sociales muchos ciudadanos anónimos pueden aportar sus opiniones ejerciendo ese derecho que debe ser consustancial al ser humano.
Gracias por tu reflexión.
Estoy de acuerdo en lo que se refiere al poder de las redes sociales. No obstante, creo también que hay que ser cuidadosos a la hora de tomar por bueno el “juicio del pueblo” en muchos casos.
No vi el citado programa de La Noria, y no es que tenga especial admiración por su presentador y su formato, pero por hacer de abogado del diablo, me pregunto que hubiera pasado si en algún medio “serio” se hubiera hecho una entrevista a esta misma mujer, digamos con el objeto periodistico de saber cuál es el entorno de un menor que puede llegar a involucrarse en algo así, y cual puede ser el drama de su familia. ¿Se habría creado la misma corriente de opinión?
Siempre debemos recapacitar y analizar los temas de modo objetivo. La sentencia de 8.000 personas que participan en un determinado foro, seguramente con preferencias y gustos similares en muchos casos, no necesariamente siempre significa que tengan la razón.
Buenos días,
Me gusta el ejercicio de hacer de abogado del diablo y te debo confesar que a veces lo practico.
Sin embargo, siempre he tenido un respeto enorme por los lectores, oyentes y televidentes y creo en su sentido crítico, tanto si son 8.000 como sin 8, por lo que pienso que si a la madre del ‘El Cuco’ se la hubiera entrevistado en un medio ‘serio’, como así ocurrió, con un objetivo que no fuera el propiamente periodístico, la reacción habría sido similar a la que se ha suscitado.
De hecho la viralidad que se ha producido ha trascendido a la propia plataforma en la que se han posicionado esas 8.000 personas y la propia cadena de televisión que respalda el programa ha tenido que justificarse. Si a esto unimos la posición adoptada por algunos anunciantes, pues todo ello me lleva a pensar que algo de razón subyace a toda esta polémica.
Gracias por tu comentario, abogado del diablo.
El fin no justifica los medios. Si el fin es informar a los ciudadanos acerca de un delito cometido y para ello se beneficia ampliamente al que lo ha cometido, podría llegar un punto en que alguien delinquiría para ser beneficiado. ¿Verdad?
Hola Tuzo:
A veces es complicado saber cuándo el fin justifica los medios.
En este caso, está claro que el interés es más bien ganar audiencia a cualquier precio.
Sobre el debate de si se debe ofrecer información personal sobre un delincuente, depende del enfoque que se le dé; por ejemplo, una de las obras maestras de la literatura del siglo XX refleja la vida de dos asesinos que mataron a una familia en EE UU -A sangre fría, de Truman Capote-.
Ese libro también suscitó en su época un apasionado debate, y al final ha quedado como una de las principales novelas del pasado siglo por su calidad literaria.
Cosa que no ocurrirá con la Noria.
Gracias por tu comentario.
Hola Luisa,
Me ha encantado tu artículo. Estamos viviendo un cambio de paradigma en el que las personas son más importantes, son la clave.
Las redes sociales, internet como plataforma, permiten a cada ciudadano tener su voz, su opinión y, lo que es más importante, ser capaces de COLABORAR a escala global.
La plataforma que se ha utilizado en el caso que menciones es un blog y la petición se ha registrado en ACTUABLE.ES, sitio web donde tienen cabida este tipo de movilizaciones.
Los mismos principios (la bidireccionalidad y la desintermediación) que permiten el caso que nos ocupa, también hacen posible que plataformas como KIVA se utilicen para financiar a emprendedores a través de microcréditos.
Sin duda, tiempos fascinantes.
Un fuerte abrazo y enhorabuena por el artículo una vez más.
Manuel A. Velázquez
Socio de Expense Reduction Analysts
Hola, Manuel:
Te estaba esperando y se me hacía raro que no hubieras intervenido ya. Tus comentarios siempre me adulan, pero sabes que también aceptaría de buen grado tus críticas, porque tus análisis aportan reflexiones valiosas.
Espero tener la oportunidad de saludarte esta tarde en la conferencia que organizáis en Iniciador Valladolid con la presencia de José Rolando Álvarez. Estoy segura que suscitará un gran interés.
Muchas gracias, un abrazo.