La crisis supuso una enorme caída de la exportación (y de la importación) en el año 2009, seguida de una fuerte recuperación en 2010 que ha llevado a que las ventas exteriores hayan superado ampliamente el máximo alcanzado en 2008. En el caso de Castilla y León, en el conjunto de la exportación 2009 mostró una caída casi imperceptible, seguida de una fuerte recuperación en 2010 con el resultado neto de que la exportación de Castilla y León en 2010 será un 20% más alta que la de 2008, mientras que el conjunto de España fue de menos del 8%.
Ya hemos visto en otras ocasiones que nuestras exportaciones están dominadas por el sector de automoción (automóviles y componentes), que sobrepasa el 50% del total. En este sector la tendencia fue de descenso hasta 2009, en el que ha tenido un punto de inflexión recuperando la senda alcista hasta igualarse a las cifras de 2004. Los productos distintos de automoción en Castilla y León han mostrado un crecimiento continuado desde el comienzo de la década. A diferencia del resto de España, la exportación de estos productos en la región no cayó en 2009 y experimentó un fuerte crecimiento en 2010 al igual que el resto de España. Esto ha llevado a que las exportaciones en 2010 sobrepasaran en más del 22% el máximo alcanzado en el 2008-2009.
En manos externas
Es decir, en 2008 y 2009, annus horribilis para la economía, parece que nuestras exportaciones no se han resentido tanto como hubiera cabido esperar. Una cuestión interesante es si la crisis ha cambiado el perfil y el número de empresas exportadoras de Castilla y León. La respuesta es que no, siguen siendo las mismas. Las exportaciones siguen concentrándose en unas pocas empresas y además en manos externas. El 60% de nuestras exportaciones se hace por unas siete empresas, todas ellas controladas por capital extranjero. Si incluimos la exportación que está controlada de forma indirecta por intereses extranjeros, como en el caso de componentes de automoción, se concluye que el 70% de la exportación de Castilla y León podría estar controlada por intereses ajenos a nuestras empresas locales y podría ser objeto de deslocalización, como ya está pasando en cierta medida.
Los análisis del perfil de la empresa exportadora nos indican hasta dónde llega la concentración de nuestras exportaciones y la minúscula dimensión de la mayoría de nuestros exportadores. De un total de 3.800 empresas exportadoras en Castilla y León en 2010, 2.300 no llegaron a exportar 50.000 euros y sólo 1.300 han conseguido exportar de forma consecutiva en los últimos 4 años. La crisis no cambiado este panorama porque estas mismas cifras se repiten de manera tozuda desde 2005.