El número de oficinas bancarias operativas en España al cierre de 2012 se situó en 38.227 sucursales, la segunda cifra más alta de toda la Eurozona, aunque un 4,9% menos que en 2011, lo que supone la desaparición de 1.963 oficinas en un año, equivalente al 35,7% del cierre de oficinas en la Zona Euro, según los datos del Banco Central Europeo (BCE).
De este modo, desde que en 2008 comenzara la crisis financiera en la UE, el número de oficinas bancarias en España ha disminuido en 7.925 sucursales, un 17,2% menos, lo que supone el 53,6% del ajuste realizado en el conjunto de la Zona Euro.
Ajuste
En el conjunto de la UE, el número de oficinas bancarias al cierre de 2012 sumaba un total de 218.687, lo que implica un descenso de 5.528 sucursales respecto a 2011 y de 19.948 desde el estallido de la crisis financiera en Europa en 2008.
De hecho, entre los países de la Eurozona sólo Austria, Eslovenia y Eslovaquia registraron ligeros aumentos en el número de oficinas bancarias, mientras que entre el resto de países de los Veintisiete también se apreciaron aumentos en Bulgaria, República Checa, Lituania y Suecia.
Pérdida de empleo
Asimismo, los datos del BCE revelan que la reducción en el número de oficinas en España por parte de entidades domésticas se tradujo en la pérdida de 11.664 empleos durante 2012, hasta un total de 234.292 empleados, lo que implica la pérdida de 42.205 empleos entre las entidades de crédito domésticas desde 2008.
De este modo, según los datos del BCE, España asumió en 2012 el 27,2% del total del ajuste efectuado en la Zona Euro, porcentaje que se eleva al 32,9% desde 2008.
Castilla y León Económica/ Europa Press