Rajoy pide a la UE instrumentos de financiación para abordar las reformas comprometidas

Barroso no descarta flexibilizar el objetivo de déficit público español para que la consolidación fiscal no afecte al crecimiento
Mariano Rajoy y José Manuel Durao Barroso.a y
De izquierda a derecha, Mariano Rajoy y José Manuel Durao Barroso, presidentes del Gobierno de España y de la Comisión Europea, respectivamente.

Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, ratificó este lunes su apoyo al Tratado para reformar la disciplina fiscal y recordó que España ya lo incorporó a su Constitución incluso antes de ser aprobado en la UE. Sin embargo, durante una reunión mantenida con José Manuel Durao Barroso, presidente de la Comisión Europea, también solicitó instrumentos para facilitar la financiación mientras el Ejecutivo lleva a cabo los ajustes presupuestarios y las reformas laboral y financiera comprometidas con Bruselas.

“Hay que hacer a la vez consolidación presupuestaria, reformas, pero también liquidez y decisiones europeas en ese sentido”, argumentó Rajoy, quien celebró que el Consejo Europeo de esta tarde se centre en el crecimiento y el empleo.

“El Gobierno será un fiel aliado de las instituciones europeas y por supuesto será un fiel aliado de la Comisión en unos momentos difíciles y complicados para el proceso de la integración europea. Nosotros seremos un interlocutor fiable, comprometido siempre con el interés general de Europa y naturalmente con nuestros propios intereses como españoles”, prometió Rajoy a Barroso. Asimismo, le manifestó su “apuesta irrenunciable por el euro”.

Flexibilizar el objetivo de déficit

Por su parte, Barroso mostró su disposición a flexibilizar el objetivo de déficit español en 2012 para ajustarlo al nuevo escenario de recesión, tal y como reclama el nuevo Gobierno, y dio a entender que esta cuestión será discutida por los ministros de Economía de la UE.

España se comprometió ante la UE a reducir su déficit desde el 8% del año pasado -cifra que supone un desvío de 2 puntos respecto a la meta inicial del 6%- al 4,4% del PIB en 2012. Sin embargo, este objetivo se pactó con unas previsiones que auguraban que la economía española crecería este año, mientras que las últimas cifras del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco de España vaticinan una recesión.

“La consolidación debe hacerse en la medida de lo posible sin desatender al crecimiento, garantizando por ejemplo que los gastos contribuyan a su estímulo”, concluyó Barroso.

Europa Press / Castilla y León Económica

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