Más de medio siglo de historia contempla al grupo bodeguero segoviano Avelino Vegas, una empresa familiar a la que en la actualidad se ha incorporado la tercera generación, con Maribel García Vegas, ingeniera agrónoma, que diseño y dirigió la construcción de la nueva bodega de la compañía, inaugurada en 2008 y dotada de la tecnología más avanzada del momento para la obtención de vinos blancos de calidad.
La vocación exportadora de la firma queda constatada por la exportación del 30% de su producción a más de 35 países, una cifra nada desdeñable si tenemos en cuenta que la compañía elabora un total de 8 millones de botellas de sus referencias de Rueda, Ribera del Duero y Vino de la Tierra de Castilla y León.
Reto
El principal reto de la compañía, como explican sus responsables, es volcarse en EE UU, donde ya tiene presencia, pero donde quieren aumentarla “por el potencial de este mercado”.
La historia de la bodega tiene una fecha un nombre y un lugar. En 1950, Avelino Vegas fundó la empresa del mismo nombre en la localidad segoviana de Santiuste de San Juan Bautista. En los inicios comenzó su actividad elaborando vinos con las uvas de viñedos de la zona, en especial de la variedad verdejo. Este territorio del oeste de la provincia de Segovia cuenta con 17 municipios acogidos a la Denominación de Origen Rueda.
Viñedos antiguos
En la actualidad, la bodega controla 600 hectáreas de viñedo en la Denominación de Origen Rueda, principalmente verdejo y en menor medida sauvignon blanc y viura. “Avelino Vegas tiene uno de sus activos más importantes en la calidad de las uvas de viñas viejas de verdejo, cosechadas en la provincia de Segovia, con un volumen de comercialización que ronda los cinco millones de botellas”, explican sus responsables.
En 2010 la bodega lanzó Circe, un verdejo obtenido a partir de una rigurosa selección de las mejores uvas de cepas casi centenarias, con una botella de “atractivo y original” diseño.
Hace más de 2 décadas, Avelino Vegas dio el salto a Ribera del Duero donde compró la antigua cooperativa Santísima Trinidad, en el municipio burgalés de Fuentespina, para constituir Bodegas Fuentespina. Los antiguos socios de la cooperativa continúan abasteciendo a la bodega del grupo, que maneja directamente 500 hectáreas de viñedo, con una antigüedad media de 35 años y con diversas parcelas plantadas entre 1917 y 1945. De éstas proceden las uvas de us tintos de gama superior: Fuentespina Selección y F de Fuentespina.