Es una realidad que en España el vino no acaba de enganchar a la gente joven. Por eso, algunas bodegas se han puesto manos a la obra para intentar invertir esta tendencia con el lanzamiento de productos más adaptados a los gustos de la denominada Generación de Internet (personas de entre 20 y 40 años). Éste es el caso de Copaboca, una bodega vallisoletana que a su gama de vino tradicionales, acogidos a la Denominación de Origen Rueda, suma otros como Secret Moment, con baja graduación (ocho grados) y aguja; y On Energy Drink, el mismo producto pero con una maceración de ginseng y té verde, al que en la bodega denominan como primer vino energético del mercado.
Los proyectos de productos especiales de Copaboca no se detienen ahí. Atendiendo a la demanda del sector hotelero, ha lanzado vinos gastronómicos, para consumirse con un plato específico. Es el caso de Abrebocas de Domingo, un caldo seco elaborado a partir de variedades verdejo y sauvignon blanc, diseñado específicamente para tomar con paella; y Liu & Liu, un coupage de verdejo y sauvignon blanc para consumir con platos orientales como sustituto del sake.
Vinos representativos
Estas referencias complementan los vinos más representativos de la bodega vallisoletana, que son Copaboca -que acapara un 70% de la producción global de la bodega, que alcanza el millón de botellas-, y Gorgorito, dos blancos acogidos a la Denominación de Origen Rueda. De esta segunda marca también elaboran un tinto con Denominación de Origen Toro.
El nacimiento de Copaboca se sitúa en la actividad de un matrimonio de jóvenes viticultores, Felipe Alonso y Charo Galindo, quienes pusieron en marcha el proyecto en Torrecilla de la Abadesa, dentro de la Reserva Natural Riberas de Castronuño-Vega del Duero, al que se incorporó Santiago Enciso. Al tratarse de un espacio protegido, el uso de herbicidas y pesticidas está limitado, por lo que las uvas son naturales y “diferentes”, explican. En 2008 elaboraron la primera añada en unas instalaciones alquiladas y comenzaron la construcción de una bodega en ese municipio vallisoletano; y otra en Tordesillas de grandes dimensiones, cuyos trabajos de edificación se encuentran en su fase final, en la que han invertido 2,5 millones de euros.
El centro Copaboca de Interpretación de alimentos y vinos naturales está pensado para el enoturismo y dedicará un espacio a la cultura, con exposiciones itinerantes y un mercado permanente de artesanos, con una tienda de más de 1.000 metros cuadrados. Este proyecto se ha concebido porque las instalaciones se sitúan al pie de la Autovía A-62, por donde pasan 15 millones de vehículos al año. Allí también se organizarán catas y cursos, entre otras actividades.
Exportación
Del millón de botellas elaboradas, el 45% se exporta, sobre todo a Asia, “un mercado en el que no se han movido muchas bodegas españolas”, precisan, así como la UE y Escandinavia.