La realidad del vehículo eléctrico

Por: Carlos Martín Tobalina
twizy

Ninguna expectativa industrial ha generado tanta corriente de opinión en los últimos meses como la llegada del vehículo eléctrico a la realidad socioeconómica internacional. Para conseguir una perspectiva útil sobre el vehículo eléctrico, es importante hacer un análisis de lo que supone la llegada de un nuevo producto al mercado y el grado de afección que tendrá en el entorno social y económico. Hay varios motivos que han confluido en este ciclo recesivo para acelerar el proceso de desarrollo del vehículo eléctrico. Motivos geoestratégicos, dependencia de única fuente energética ligada a territorios más o menos convulsos en su gestión política, apuesta por la sostenibilidad ambiental en el entorno internacional y búsqueda de nuevos nichos de mercado en un sector muy maduro como la automoción tradicional, son causas directas de la apuesta de algunos de los principales fabricantes del sector por la industrialización de este tipo de vehículo.

El aterrizaje de este tipo de vehículo ha desencadenado de parte de algunas Administraciones, como la Junta de Castilla y León, un conjunto de planes, medidas y estrategias para acompañar la paulatina introducción de este modo de transporte a la sociedad y para trabajar sobre la eliminación de las barreras de entrada del VE al mercado, barreras que paso a explicar a continuación.

Optimizar la autonomía

La industrialización del vehículo eléctrico tiene ante sí el gran reto de conseguir evolucionar las baterías, dotándolas de mayor autonomía y duración. España ha perdido la batalla (que no la guerra) por la consecución de una planta de fabricación de baterías que se consolida como el elemento crítico y fundamental en el funcionamiento de este tipo de vehículos. La llegada de un vehículo con clara vocación urbana obliga a dotar los municipios de infraestructuras de recarga inteligente para garantizar la autonomía del vehículo. Este trabajo es vital para disipar sobre el ciudadano la incógnita de la autonomía del vehículo. La autonomía no es sólo cuestión de la capacidad de la batería, también es cuestión de garantía de accesibilidad de punto de recarga en el entorno urbano.

No sólo se debe hacer un esfuerzo en la industrialización del vehículo, en el perfeccionamiento de la batería y en las infraestructuras, también es preceptivo una impecable labor de difusión y motivación de un mercado hoy deprimido, que observa en una mezcla de esperanza, expectación, recelo e incredulidad la llegada del vehículo eléctrico. Estas sensaciones contrarias de los consumidores, han de ser correspondidas por los fabricantes a través de una clara difusión de las ventajas que tiene este tipo de movilidad.

Por otro lado, es necesario explicar cuál es el papel de cada agente en este nuevo sector: industria de la automoción, eléctricas, empresas de infraestructuras e incluso Administraciones (especialmente las municipales) deben aclararse sobre el papel que juegan en este sector para procurar un esquema claro de funcionamiento de la movilidad eléctrica.

Aceptación del consumidor

El grado de aceptación por parte del consumidor de este nuevo producto va a depender de unas variables que van a influir en su motivación, como el precio, variable que  debe ser incentivada por la iniciativa pública al tratarse de un nuevo producto que ha sufrido un intenso desarrollo en poco tiempo (sobre todo en el área crítica de las baterías), lo que en cierta lógica debería traducirse en productos con precios más altos en la fase de lanzamiento para amortizar la inversión en desarrollo que han hecho los constructores. La confianza de un consumidor en un nuevo producto como el vehículo eléctrico estará condicionada a dos conceptos, la independencia y la libertad otorgada por el vehículo eléctrico al ciudadano.

La todavía escasa autonomía de este tipo de vehículos (alrededor de los 100 km), convierte al vehículo eléctrico en un producto cautivo de los puntos de recarga. Los municipios juegan un papel fundamental en todo este proceso de diseño urbanístico y en las medidas de facilitación de la movilidad eléctrica en zonas urbanas. El coste de mantenimiento del vehículo eléctrico será un 15% menor que el de un vehículo de combustión térmica. En cuanto al coste de alimentación de fuentes energéticas, se estima el coste de la recarga eléctrica en 1/3 aproximadamente del coste de recarga de un vehículo convencional.

Resolver la incertidumbre

Todas estas incógnitas e incertidumbres sobre el funcionamiento del vehículo eléctrico y de las infraestructuras necesarias se irán disipando desde la industrialización de soluciones con desarrollos tecnológicos, lo que constituirá una garantía de actividad y empleo; bienvenida pues sea esta incertidumbre en tanto en cuanto obligue a actividades industriales ligadas a nuevos desarrollos tecnológicos.

No es justo cargar con una excesiva responsabilidad en la etapa de lanzamiento al vehículo eléctrico. Asistimos en los últimos meses a una ceremonia de la confusión sobre este nuevo sector en la que conviven, por un lado, las posturas más optimistas, y por otro lado, existe una corriente, a veces interesada, de agentes que tratan de despreciar la aparición del vehículo eléctrico en la industria y en el mercado de la movilidad.

En mi opinión, creo que ambas posturas son desacertadas. No es recomendable hinchar las expectativas de un nuevo sector industrial y de un nuevo producto, responsabilizándolo de la recuperación industrial de nuestra comunidad autónoma y del país. El vehículo eléctrico no nos sacará de la recesión del mismo modo que no es su causante. Por otro lado, el vehículo eléctrico no se merece el desprecio de agentes económicos ligados al mundo de la movilidad. Demuestran debilidad aquéllos que públicamente tratan de denigrar la aparición de un nuevo producto en el mercado sin conocer el grado de desarrollo y el alcance que tiene el mismo (alguna declaración de este tipo hemos tenido la oportunidad de escuchar recientemente). Démosle, pues, al vehículo eléctrico el derecho que tiene todo producto a triunfar o fracasar en el mercado sin esteriotiparlo de antemano.

Liderazgo en Castilla y León

Castilla y León no se puede permitir el lujo de perder el tren del liderazgo en este nuevo sector. Será la primera comunidad autónoma en industrializarlo en España, debe ser pues la primera en generar programas de difusión, en instalar fuentes de recarga fiables y tecnológicamente avanzadas y en generar actividad y empleo inducida ligada a este nuevo sector. De estos pilares trata la Estrategia Regional del vehículo eléctrico recientemente presentada.

La constitución de un cluster o grupo de desarrollo de este sector animará la creación de programas que articulen la correcta adecuación del vehículo eléctrico a la realidad social de Castilla y León. La movilidad sostenible en nuestra región ha de ser una referencia internacional.

4 comentarios

  1. El vehiculo eléctrico, es un producto impuesto por los distintos gobiernos, por medio de incentivos o presiones a la industria, pero que aun no esta maduro, y de momento no es interesante para el ciudadano, pero que costara mucho dinero a las arcas públicas.
    No es el momento de incentivar humo, cuando el mercado demande este producto, los fabricantes lo producirán.

  2. Creo que Martín Tobalina acierta en su posición ecléctica respecto al mercado de la movilidad eléctrica. Es un mercado cierto, pero el horizonte temporal es incierto, y cualquier empresario sabe que lo incierto se acaba transformando en largo plazo, y éste exige financiarse y esto implica un coste de capital, y éste es un obstáculo para la innovación y el desarrollo, imprescindible tanto para el vehículo eléctrico como para la infraestructura de recarga. Saludos desde el sector.

  3. Me parece un artículo muy interesante y muy bien planteado, realmente el VE ha llegado para mejorar la movilidad de las personas, reducir los efectos perversos de los coches en materia de emisiones y ruido y ayudar a impulsar la actividad en el sector de la automoción y la energía. Que nos queda mucho por hacer??? por supuesto y al que no le gusten los retos que siga quemando gasolina.
    Slds
    CC

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