El Grupo Inzamac sigue dando pasos firmes en su expansión internacional con la reciente compra del 70% de la lusa Geosolve, lo que le abre las puertas a los mercados de habla portuguesa. Geosolve cuenta con una plantilla cercana a las 60 personas, de las que un 70% son licenciados, y factura tres millones de euros, si bien se prevé incrementar esta cifra tras su integración en el holding zamorano. Para Inzamac, la actividad fuera de nuestras fronteras ha adquirido una importancia capital, como lo demuestran los datos: en 2005 la facturación procedente del área internacional era del 17% y en la actualidad ronda el 48%.
Iván Rodríguez Bollon, consejero del grupo, adelanta que en 2011 “prevemos que nuestra cifra de negocio generada en el extranjero supere a la nacional”. Inzamac está presente en Portugal desde hace cuatro años, cuando constituyó su filial Inzapor, si bien hasta ahora su actividad en tierras lusas se había limitado a un proyecto desarrollado en las Islas Azores. La cercanía de Zamora al país vecino ha provocado que “siempre hayamos tenido un ojo puesto allí”, asegura Rodríguez Bollon. Este hecho les llevó a conocer a los responsables de Geosolve, una empresa “similar a la nuestra, establecimos contactos, constatamos las sinergias que existían entre ambas y que la operación representaba una oportunidad para adquirir participación societaria”, precisa el ejecutivo. De este modo, Geosolve, que cuenta con su sede central en Lisboa y delegaciones en Oporto y Coimbra, aporta su experiencia en conocimientos sobre temas medioambientales, geotecnia y cartografía, principalmente; e Inzamac la respalda en el ámbito alimentario y de prevención de riesgos laborales. Así, podrán abordar en España proyectos a los que hasta ahora no habían tenido acceso, por ejemplo en el ámbito del descabezado de pilotes.
Mercados luso y africano
Como precisa el consejero del grupo zamorano, “Portugal se ha convertido en una zona más de trabajo para nosotros y nuestros trabajadores han entendido que con la situación actual en España hace falta un esfuerzo por parte de todos para mantener los puestos de trabajo”. La sociedad lusa tiene presencia en Cabo Verde, Mozambique y Macao con trabajos de asistencia técnica y supervisión y tras la operación con el grupo familiar zamorano ha ganado dos contratos en Angola para dar servicio en la construcción de autovías con laboratorios de obra.
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