“Nuestro objetivo sigue siendo acompañar a nuestros clientes como facilitadores de soluciones”, subraya Gonzalo Tamariz Sáenz, CEO de Sáenz Suministros Industriales, al detallar la “decidida apuesta” de esta compañía familiar vallisoletana por colaborar en la reducción de los costes de las empresas y mejorar su rendimiento. Así, enumera sistemas preventivos como el equipo de medición Optibelt TT, el láser Pointer II, “que facilita la alineación de transmisiones”; y el Servicie Kit, “para tener las mejores herramientas de control y predicción para los trabajos de mantenimientos y reparación”, entre otros.
“Es una tarea casi imposible catalogar todos los productos especiales en este área. Por eso, basamos nuestra actividad en escuchar de primera mano las necesidades de los profesionales con los que trabajamos y aplicar nuestra experiencia para encontrar la solución más adecuada en cada caso”, apunta María Tamariz Sáenz, CEO de Sáenz. Al respecto, explica que la compañía cuenta con aplicaciones que surgen de las alianzas con sus proveedores, como sistemas de programación de suministros, estudios de rendimiento o control de consumo y sustitución. Con estas medidas, se consigue que los componentes de fabricación tengan una mayor vida útil al controlar la sustitución de piezas y prever fechas y paradas de producción, entre otros servicios que permiten una mejor organización.
“Están siendo años complicados para crecer, dadas las circunstancias que están atravesando nuestros clientes, pero no podemos bajar la guardia y debemos mantener la ilusión por acompañarlos. Los retos son más fuertes, por lo que tenemos que aumentar el esfuerzo”, apunta Gonzalo Tamariz Sáenz.
Profesionalidad
Por su parte, la CEO de la compañía destaca la profesionalidad de su equipo y su preparación para superar situaciones complicadas, al tiempo que agradece la unión de fuerzas y recursos tanto con sus clientes como con los fabricantes. “Creo que es preciso destacar y agradecer la apuesta de muchas empresas ubicadas en Castilla y León por priorizar a los proveedores locales y así ayudar al desarrollo de la economía regional, al tiempo que se aseguran soluciones más rápidas ante los imprevistos que se pueden producir en sus procesos de fabricación”, destaca María Tamariz Sáenz.
Más información en el número de enero de la revista Castilla y León Económica