Buen producto, cuidado montaje y espléndida bodega en el Restaurante A Barra. Con estos 3 ingredientes es difícil fallar en el mundo de la cocina, sobre todo si las elaboraciones son sencillas, sin mucha injerencia sobre la materia prima y recuerdan los sabores del recetario tradicional, a precios contenidos; un ambicioso montaje con llamativos espacios como la barra de mármol con lugar para 22 comensales; y una carta de vinos con más de 700 referencias. Tanto es así que en poco tiempo ha conseguido 1 estrella Michelin.
La unión de 2 empresarios del sector agroalimentario como son José Gómez, de Jamones Joselito, y Cayo Martínez, de Conservas La Catedral, ha hecho posible este proyecto culinario que ocupa el espacio de lo que fue El Bodegón, y al que se ha unido en los fogones Juan Antonio Medina, tras 2 décadas en Zalacaín. Platos de factura sencilla como la Ensalada de berberechos o el Arroz negro de sepia, que no emocionan, lo mismo sucede con el Salmonete, donde uno echa en falta más riesgo para sublimar el producto. De quitarse el sombrero el jamón de Joselito, untuoso y recio. Para estudiar y disfrutar la oferta de vinos, con muchas referencias de champagnes y generosos.