Rafael Álvarez tomó posesión este jueves como decano del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Valladolid (IngenierosVA) en un acto celebrado este miércoles en su sede, en el que Álvarez tomó el testigo de Javier Escribano, anterior decano, y se constituyeron los nuevos órganos de gobierno de la institución colegial.
Los componentes de la nueva Junta de Gobierno de IngenierosVA juraron o prometieron sus cargos para iniciar una nueva andadura que pretende continuar con las principales líneas de actuación de los últimos 4 años, con una apuesta por la ingeniería y la industria como motores del desarrollo de la sociedad.
Reto
Álvarez, ingeniero técnico industrial electrónico por la Escuela de Ingenierías Industriales de la Universidad de Valladolid, aborda este nombramiento como “un reto tan atractivo como interesante en el que poder defender los intereses de los colegiados, así como impulsar el conocimiento de la industria y de la ingeniería al conjunto de la sociedad”.
Actualmente, Álvarez es el director de Irecyl, una ingeniería y empresa de representaciones eléctricas, expertos en media tensión, calidad de la energía desarrollando la actividad en ingeniera de energías renovables, fotovoltaicas, eólica, cogeneración, con una apuesta hacia la descarbonización y movilidad libre de emisiones contaminantes.
Escribano, por su parte, comentó: “creo que en los últimos 4 años hemos comunicado a la sociedad la labor de la ingeniería y su presencia imprescindible para la evolución de un país moderno, todo ello sin olvidar la defensa de los intereses profesionales de los colegiados. El Colegio queda en buenas manos”.
Junta de Gobierno
Además de por Álvarez, la Junta de Gobierno de IngenierosVA está formada por Óscar García, vicedecano; Antonio Hernández, secretario; María López, vicesecretaria; Jorge Alberto Bustos, tesorero; Fernando Arranz, interventor; y los vocales: Jesus Ángel Encinas, Luis Moretón, Silvia Tomillo, Pedro Luis Díez, Francisco Javier Barbero y Borja Fernández.
Sus responsables destacan que IngenierosVA continuará apostando por ordenar el ejercicio de la profesión, dentro del marco de las leyes, y vigilar el cumplimiento de éstas, además de velar para que la actividad profesional se adecue a los intereses de los ciudadanos.
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