El vino es uno de los sectores que más puede contribuir a la recuperación de la economía de Castilla y León, según la opinión generalizada de los ponentes del I Foro de Economía y Sociedad organizado en Valladolid con la viticultura como eje central. No obstante, es preciso que las empresas dedicadas a la viticultura apuesten por la internacionalización y la innovación, a la vez que se dirigen a un público más joven y refuerzan la promoción de sus productos en el mercado nacional, indicó Juan Carlos de Margarida, decano del Colegio de Economistas de Valladolid.
El encuentro reunió a más de 200 participantes y 35 profesionales del sector del vino durante 2 días en la Escuela de Estudios Empresariales de la Universidad de Valladolid. Algunas de sus conclusiones son las siguientes:
• Las bodegas tienen que apostar aún más por la diversificación de líneas de negocio, aprovechando los recursos existentes y las sinergias de actividades no directamente relacionadas con el sector pero si complementarias.
• En enoturismo, en concreto, falta profesionalización, márquetin y formación.
• Las administraciones públicas tienen que colaborar con el sector creando el marco adecuado para su desarrollo, tanto a nivel de normativa como de apoyo tecnológico como de infraestructuras.
• Existe una tendencia hacia el consumo de productos alcohólicos de baja graduación (de 14 a 10).
• Los jóvenes de entre 20 y 30 años son un sector con el que no se ha trabajado suficientemente. Hay que dirigirse a ellos, utilizando las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
• La crisis ha cambiado las pautas de comportamiento, lo que requiere producir vinos a nivel industrial con un alto nivel de competitividad. Las posibilidades de crecimiento del sector del vino pasan por 2 tipos de estrategias: de crecimiento de la empresa en mercados internacionales (internacionalización) y de innovación permanente (innovación).
• En este sentido, el uso de las nuevas tecnologías, el aprovechamiento de las redes sociales y el uso de las herramientas web 2.0, resultan fundamentales para buscar mercados internacionales.
• La sociedad está cambiando sus hábitos, gustos y patrones de consumo. El ocio se ha convertido en uno de los sectores emergentes. En este campo, el mundo del vino y, también el de la uva, tienen muchas oportunidades. Para ello, hay que crear vínculos entre la bodega y los consumidores.
• Los vinos españoles tienen una gran oportunidad en los mercados más importantes. Mas de 100 millones de consumidores no beben vino, frente a los 43 millones que si lo hacen.
• Se ha detectado una pérdida de penetración en el mercado nacional, no tanto por la crisis como por acciones como la legislación en materia de seguridad vial o la prohibición en establecimientos públicos del consumo de tabaco.
Para afrontar los retos a los que se enfrenta el sector, los ponentes propusieron soluciones concretas, que pasan por:
• Diseñar planes de implantación de los vinos de Castilla y León en el resto de países mejorando la eficacia. Para ello, hay que utilizar tanto medios tradicionales (relaciones publicas, misiones comerciales, campañas, presencia en ferias) como las nuevas tecnologías 2.0.
• En la proyección, tanto nacional como internacional, se debe crear una marca o imagen que muestre el vino como alimento natural, de manera que se cree cultura del vino. El objetivo prioritario es que se pueda consumir diariamente con un precio equilibrado.
• Mejorar la competitividad a través de la innovación tecnológica, para lo que resulta necesario realizar un elevado esfuerzo en I+D+i.
• Hay que centrarse en una innovación descriptiva, es decir, ser los primeros en hacer una línea de productos distinta.
• Diversificar las líneas de negocio: aprovechar y rentabilizar las virtudes de la uva; ocio familiar; potenciar el enoturismo que debe servir como canal de distribución y de comunicación; ligar productos agroalimentarios de calidad a las bodegas; aprovechar la infraestructura de turismo rural, puesto que Castilla y León es un referente en este campo: cosmética natural; patrimonio cultural; medio ambiente.
• Mejorar la productividad y tener un competo control de la gestión del proceso productivo. Para ello es fundamental el desarrollo de las TIC dentro de las empresas vitivinícolas. Es imprescindible que se encuentren automatizadas la gestión de calidad y de los clientes, los servicios de venta y las tareas relativas a producción y distribución.
• Las piezas clave para el éxito en las tecnologías 2.0 son el posicionamiento web y la apertura de nuevos canales de comunicación con la entrada en las redes sociales.
Castilla y León Económica
