Los niveles medios de impago soportados por las empresas españolas disminuyeron un 62% en el conjunto de 2010 respecto al año anterior, de acuerdo con el Índice Crédito y Caución de Incumplimiento. La evolución del pasado año permitió encadenar 5 trimestres de mejora de los resultados, con un descenso que se estabilizó entorno al 60%.
Estos datos son la consecuencia del rigor técnico con el que las empresas proveedoras seleccionan a sus clientes, anteponiendo unas garantías mínimas de cobro al volumen de su actividad comercial. Con ello tratan de evitar unos impagos que provocan, en el 47% de las empresas que los padecen, el retraso en el pago a proveedores, con lo que la morosidad se multiplica a lo largo de la cadena comercial. Sin embargo, a pesar de esta disminución sostenida, las tasas de efectos impagados se encuentran aún lejos de su valor medio a largo plazo, dado el intenso crecimiento que registraron hasta el segundo trimestre de 2009.
Castilla y León Económica