Pilar del Olmo, consejera de Economía y Hacienda, presentó este martes en Madrid las fortalezas y ventajas competitivas de Castilla y León a representantes de empresas, embajadas y otras instituciones, con el fin de atraer nuevas inversiones al territorio autonómico y reforzar la imagen de marca de la región como oportunidad de negocio de éxito.
La jornada se enmarca dentro del IV Plan de Internacionalización Empresarial 2016-20 de la Junta, que tiene entre sus principales ejes la promoción y la captación de proyectos capaces de generar empleo y riqueza.
Rasgos distintivos
Con el lema Castilla y León, una apuesta segura, la consejera de Economía y Hacienda mantuvo una reunión de trabajo con más de medio centenar de potenciales inversores, a los que informó de los rasgos distintivos que hacen atractiva a la región. Entre ellos y en primer lugar, la estabilidad política y un clima de diálogo social afianzado durante años, una característica diferencial “muy interesante en un momento de grandes incertidumbres como el actual”, como apuntan desde el Ejecutivo autonómico.
Junto a esto, la presentación ofreció datos sobre la oferta de polígonos industriales y parques tecnológicos de titularidad pública a disposición de las compañías, con condiciones “tan favorables para propiciar su asentamiento como descuentos de hasta el 50% sobre el precio de tarifa o la posibilidad de aplazar el pago hasta 40 años”, destacan desde la Junta. A ello se suman importantes beneficios fiscales, que sitúan a Castilla y León al mismo nivel que otras autonomías de régimen común de su entorno.
Lanzadera Financiera
En la misma línea de facilitar al máximo cualquier inversión viable, Del Olmo enumeró el amplio catálogo de apoyos a las empresas que gestiona la Lanzadera Financiera. Desde su puesta en marcha, en enero de 2016, atendió casi 7.800 proyectos por un importe de 1.273 millones de euros, que conllevan una inversión asociada superior a los 2.219 millones y han contribuido a crear o mantener más de 142.300 puestos de trabajo.
La consejera hizo hincapié en los últimos productos incorporados a la Lanzadera. En concreto, se refirió al Plan de Crecimiento Innovador, que se articula a través de préstamos participativos y participaciones en el capital social; la creación de 2 nuevos fondos de garantía y, sobre todo, a las recientes y próximas convocatorias de ayudas del Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE), ente público adscrito al área de Economía y Hacienda de la Junta que se encarga de la ejecución del IV Plan de Internacionalización. Dotadas con una cuantía de 71,7 millones de euros este año, estas líneas de subvenciones han sido objeto de un rediseño en 2018 para que más compañías -en particular, pymes y autónomos- puedan materializar sus planes de creación, crecimiento, innovación, tecnología o expansión exterior, entre otros.
Compromiso con la I+D+i
La intervención de la consejera de Economía y Hacienda ante representantes de empresas, embajadas y otras instituciones también ha incluido una referencia al compromiso del Gobierno de Castilla y León con la I+D+i, que se refleja en el objetivo de dedicarle el 3% del Presupuesto autonómico al final de la legislatura. Se suma a la existencia de un capital humano “altamente cualificado”, en especial en las ramas técnicas, gracias al impulso decidido por la formación; la oportunidad que supone contar con nueve universidades y un programa de transferencia de conocimiento que las vincula al tejido productivo; la importancia que se concede a la Formación Profesional Dual, y la colaboración permanente de la Junta tanto con los centros tecnológicos, como con las Agrupaciones Empresariales Innovadoras o cluster.
Otros elementos positivos de Castilla y León que resaltó Del Olmo han sido el fácil acceso a una importante red de infraestructuras viarias y logísticas, que se complementa con la presencia de operadores que garantizan un funcionamiento adecuado de la cadena de suministro. Al hilo de esto último remarcó el liderazgo de nuestra industria en comparación con el resto de las comunidades autónomas, puesto que tiene un peso superior a la media en la estructura productiva -el 20,2%, de acuerdo con el dato más reciente de la Contabilidad Regional Trimestral, correspondiente al periodo enero-marzo de este año- y es puntera en ámbitos como el del automóvil, la agroalimentación y el aeronáutico. De ahí que destacase la apuesta de su departamento por facilitar el desarrollo de la Industria 4.0.
Como sectores emergentes la consejera de Economía y Hacienda mencionó el químico-farmacéutico y las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) asociadas a la ciberseguridad, sin olvidar las oportunidades derivadas de la economía circular y el aprovechamiento de los recursos endógenos de la comunidad autónoma.
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