Clesa, una de las empresas para las que la familia Ruiz-Mateos ha solicitado el preconcurso y que tiene una factoría de producción en Valverde de la Virgen (León), ha comenzado a abandonar el suministro de las marcas blancas de determinadas cadenas de supermercados e hipermercados. Algunos clientes que se verán afectados por esta “falta de servicio” se encuentran Aliada (marca propia de El Corte Inglés), Auchan, Alimerka, Condis, Dia, Covirán, Froiz, Unide, Mas y Alcampo.
Las empresas que dejen de recibir mercancía podrían cambiar de proveedor, una práctica habitual si no se garantiza el abastecimiento. “Lo básico y primordial es garantizar la calidad y el servicio a los consumidores”, indicaron fuentes del sector.
Cumplimiento “escrupuloso” de los pagos
De forma paralela, Nueva Rumasa ha hecho público un comunicado en el que afirma estar cumpliendo “escrupulosamente en plazo y forma tanto con el pago de intereses como del principal” con sus inversores particulares. La familia Ruiz-Mateos tachó, por tanto, de “absolutamente falso” que esté dejando de pagar a quienes invirtieron su capital en el holding empresarial.
La Junta, “encima” del problema
Tomás Villanueva, vicepresidente segundo de la Junta de Castilla y Léon y consejero de Economía y Empleo, aseguró hoy que la Administración regional está estudiando la situación de Nueva Rumasa y permanece “encima” del problema de la empresa, que cuenta con varios centros de producción en la comunidad autónoma.
El responsable de Economía y Empleo aclaró que sí se han mantenido algunos contactos con el grupoempresarial porque tiene algunos proyectos de I+D+i en la región, pero precisó que tiene “relación más directa” con la Consejería de Agricultura por el sector al que pertenece.
7,5 millones en deudas con los ganaderos
También hoy se ha hecho pública la deuda de 7,5 millones de euros que Nueva Rumasa acumula con alrededor de 520 ganaderos de vacuno, que llevan sin cobrar entre 3 y 5 meses. Cerca de la mitad de los productores afectados por el impago se encuentra en Galicia y el resto se reparten, principalmente, entre Castilla-la Mancha (comarca de Talavera de la Reina), Aragón, Castilla y León (Avila y Segovia) y Menorca.
A ellos se suman además otros 200 productores de caprino, que igualmente se han visto afectados por el impago de materia prima por parte del grupo empresarial, que compra unos 200 millones de litros de leche al año, a través de Clesa, Cacaolat y Dhul, mediante intermediarios que son los que tienen que afrontar el pago a los ganaderos.
Europa Press / Castilla y León Económica
