a

Castilla y León aprueba la eliminación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones

Bonificación del 99%
Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta.
Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta.

Las Cortes de Castilla y León, con los votos favorables de PP, Ciudadanos, Vox, UPL y Por Ávila, el voto en contra de PSOE, Podemos y la procuradora no adscrita María Montero, han puesto fin al Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que quedará bonificado al 99% en su totalidad para familiares directos, cónyuges, ascendentes o descendientes con la novedad de que se extenderá a miembros de uniones de hecho con convivencia estable de al menos 2 años anteriores a la fecha de devengo del impuesto y cuya unión se haya inscrito en el Registro de Uniones de Hecho de Castilla y León.

Es el punto y final al Impuesto de Sucesiones y Donaciones en Castilla y León con el que Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta, ha cumplido “un compromiso político y personal” para eliminar un impuesto “profundamente injusto”, según ha defendido el jefe del Ejecutivo.

Más bajadas

Además, el jefe del Ejecutivo autonómico ha aprovechado su intervención ante los parlamentarios para adelantar que ésta “no será la última bajada de tributos que se presentará en esta legislatura. Seguiremos avanzando en una fiscalidad favorable al mundo rural, actuando sobre los ámbitos que figuran en el pacto de gobierno firmado entre el Partido Popular y el partido Ciudadanos”, ha añadido.

Durante su intervención en una votación, que ha definido como una de las más importantes de la legislatura, Fernández Mañueco ha subrayado que con la eliminación de este impuesto, “que penaliza el esfuerzo de familias y empresas”, se consigue, por un lado, promover la actividad económica, la creación de empleo y las oportunidades de futuro y, por otro, proteger e incentivar a las familias, las pymes y los autónomos, tal y como se comprometió en su discurso de investidura y que está recogido en el punto 20 del Acuerdo de Gobernabilidad. 

Votación

Tras recordar que la votación de este Proyecto de Ley estaba prevista el 18 de marzo del año pasado, en un Pleno que se suspendió por la entrada en vigor del estado de alarma, ha expresado el convencimiento de la Junta de que la eliminación del impuesto entre familiares directos “es positiva para todos”.

Desde un punto de vista económico, ha remarcado que contribuye al crecimiento al eliminar una traba en la transmisión de los bienes y derechos entre familiares directos y favorece la entrega inter vivos anticipada en el tiempo. De esta forma, se permite que la ayuda económica llegue en vida a los familiares sin tener que esperar al momento del fallecimiento.

Por otra parte, el presidente autonómico también ha destacado que es “positivo desde un punto de vista social por ser más ajustado a la equidad que, en las transmisiones lucrativas mortis causa, el patrimonio acumulado con años de esfuerzo por ascendientes y cónyuges no sea objeto de una nueva imposición”. En ambos casos, ha señalado, el Gobierno de Castilla y León busca ayudar al relevo intergeneracional de empresas y negocios, favorecer el nuevo emprendimiento y la modernización, sin que el impuesto sea un obstáculo.

La práctica supresión del impuesto entre familiares directos beneficia “a todos los ciudadanos de esta tierra”. Y supondrá un ahorro para los contribuyentes de Castilla y León de alrededor de 35 millones anuales. Así, ha precisado se estimulará la demanda interna, al generar una mayor disponibilidad de rentas que incentivará la actividad económica y la inversión, incrementando el consumo por el aumento de la renta disponible. De esa forma, favorecerá a medio plazo el crecimiento económico y la creación de empleo y  generará una mayor recaudación por la hacienda autonómica en otras figuras tributarias.

2 modelos fiscales

En su exposición, Fernández Mañueco ha explicado que, en un contexto como el que estamos atravesando, “pueden aplicarse 2 modelos fiscales muy diferentes. Por un lado, un modelo de bajada de impuestos que permite la generación de más recursos públicos sin ahogar a los contribuyentes, que es por el que está apostando la Junta de Castilla y León y que ha demostrado que funciona, un modelo que generará nueva actividad económica y también nuevos puestos de trabajo. Y, por otro, el que opta por aumentar impuestos, y coarta la iniciativa emprendedora y que a medio plazo deprime el consumo, la inversión y el empleo, y con ello cae la recaudación pública”

“De lo que estamos hablando, en definitiva, es de apoyar o no a los jóvenes, de apoyar o no a la recuperación económica, de apoyar o no el crecimiento del empleo”, ha afirmado.

EFCL aplaude esta medida

Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) ha expresado su satisfacción con la supresión del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones aprobada este miércoles por las Cortes de Castilla y León, “ya que facilitará la reactivación y recuperación económica de la región, especialmente en estos tiempos de crisis derivada de la pandemia”, han señalado en la agrupación empresarial.

EFCL ha recordado que la eliminación de este tributo ha sido una “reivindicación histórica” de la asociación de empresarios familiares, “en aras a facilitar el proceso de sucesión y la continuidad de las empresas familiares, y, con ello, seguir generando empleo en Castilla y León, dado que este tipo de compañías representan el 95% del tejido empresarial de la comunidad autónoma y emplean al 80% de la población en el sector privado”.

“Impuesto injusto”

En su opinión, con la supresión de este “injusto impuesto se pone fin a un agravio comparativo para los habitantes de Castilla y León respecto a otras regiones donde ya ha sido eliminado, evitando así la fuga de patrimonios y empresas hacia esos territorios y facilitando una mayor inversión en Castilla y León”, asegura EFCL en su comunicado.

Así, además de evitar la “deslocalización y la despoblación” en favor de comunidades autónomas vecinas que no gravan el impuesto, EFCL destaca que la medida también “favorece la retención del talento de todas aquellas personas que han trabajado toda su vida en la región”.

Por último, EFCL ha lamentado que esta medida no tenga efectos retroactivos y no se aplique una excepcionalidad a los familiares de los fallecidos como consecuencia del COVID-19, quienes, “además de sufrir la pérdida de sus familiares, tendrán que afrontar el pago de este impuesto que estaba previsto ser eliminado antes de la pandemia”.

Castilla y León Económica

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información sobre la protección de datos:
· Responsable de los datos: Ediciones La Meseta, S.L.
· Finalidad: Enviar un comentario
· Derechos: Tienes derecho a acceder, rectificar o suprimir los datos, así como otros derechos como es explica en la política de privacidad.
· Información adicional: Puedes consultar la información adicional y detallada sobre la protección de datos aquí.

Noticias relacionadas

Ir al contenido