Asti ha implantado una solución de transporte interno en la empresa catalana SAS Prefabricados de Hormigón. La compañía burgalesa, tras conocer los requerimientos de SAS en una sección de la planta de la compañía en Pira (Tarragona), comenzó el trabajo de búsqueda de una solución para diseñar, desarrollar, construir e implantar un AGV (Automated Guided Vehicle) Robofast modelo contrapesado, así como 3 sistemas de transportadores de rodillos, junto con 2 peas y el sistema informático de control y gestión. En esta parte de su planta que requería automatización, SAS dispone de 3 máquinas productivas y 3 almacenes.
Una vez instalado todo el sistema, el AGV se encarga del transporte de producto desde las distintas máquinas hasta los almacenes, “gracias al sistema IT que, aunque no forma parte visible, es el elemento más importante, ya que recibe las señales de los transportadores y genera y gestiona las órdenes necesarias, consiguiendo el transporte entre 2 puntos prefijados”, según informaron desde Asti.
Transporte de hormigón
“Hacemos materiales que no pesan más de 40 o 50 kilos”, explicó Adrià Sas, director general de SAS, que anotó que “la producción es todo en serie”. Por ello, entre los encargados, “tenemos una máxima que es que los pasos nos cuestan dinero”, subrayó Sas, que incidió en que el transporte interno “no tiene ningún valor añadido, por lo tanto, hacemos el transporte interno de una forma automatizada como una solución independiente y sin mano de obra”. Además, incidió en que el vehículo de guiado automático “se utiliza para ahorrarnos el transporte interno que tenemos después de paletizar nuestras piezas en 3 máquinas diferentes” y lo hace de forma automática.
En general, en las instalaciones de AGVs, se dispone de un sistema de captura de datos o periferia distribuida con conexión por cable, que permite monitorizar las señales de ocupación de las estaciones de carga/descarga así como de apertura de puertas. En cuanto a las baterías del AGV, en SAS se utilizan de plomo ácido de 24 voltios y un sistema de intercambio manual con batería auxiliar, mesa de cambio de baterías y cargador de las mismas. La carga se realiza en una zona específica, fuera del recorrido del AGV.
Seguridad
La seguridad es de vital importancia para Asti. Por ello, el AGV instalado en SAS tiene 2 bumpers laterales que detiene el vehículo inmediatamente, cuando un obstáculo lo golpea, y se rearma una vez retirado y presionando el botón de rearme. Asimismo, dispone de un scanner de seguridad delantero que protege los movimientos de avance, y uno trasero, que protege los movimientos de retroceso, y 2 setas de emergencia. Además, disponen de una parada de emergencia vía wifi desde el sistema informático de gestión.
En cuanto a la implantación, el director general de SAS destacó la capacidad “independiente” del equipo de Asti que, durante 5 semanas estuvo en la planta instalando la solución con los propios trabajadores de la compañía catalana. “Los empleados quieren que la empresa vaya bien, por lo que creemos que la convivencia será buena, porque no sustituye a ningún trabajador, sino que es una ayuda a su trabajo”, afirmó el empresario.
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