José María Arribas, presidente de Caja de Burgos, presento este miércoles ante el consejo de administración su renuncia voluntaria al cargo, tal y como adelantó en la última asamblea general celebrada el pasado 19 de mayo. De acuerdo con lo establecido en los estatutos de la entidad, Ángel Ibáñez, vicepresidente primero, ha asumido el cargo en funciones.
Arribas, que accedió por primera vez a la presidencia de Caja de Burgos en 1983, considera que la nueva andadura de la entidad de ahorro -tras la aprobación de la segregación de activos y pasivos a favor de Banca Cívica– precisa de unos órganos de gobierno estables de cara al futuro más inmediato, que pasa por la probable salida a los mercados.
El presidente anunció el pasado 19 de mayo que tomaría esta decisión en el momento preciso para favorecer una “transición seria, rigurosa y tranquila” de cara a la nueva configuración de los órganos de gobierno de Banca Cívica establecidos en la salida a Bolsa y que precisan, además, de una reorganización del propio consejo de administración del Banco. Los motivos que han inspirado esta decisión, “son los mismos que han guiado toda mi trayectoria en la Caja: la responsabilidad, la coherencia, el respeto y la transparencia”.
Intensa trayectoria en Caja de Burgos
Arribas ocupó por primera vez la Presidencia de Caja de Burgos entre los años 1983 y 1987, cuando se llevó a cabo uno de los hitos más importantes para la entidad, como fue la rehabilitación integral de su actual sede, la Casa del Cordón. Además durante este período marcó un punto de inflexión en cuanto a la modernización y adaptación al entorno de la caja.
Por lo que respecta a la segunda etapa de su presidencia, que comenzó en 2003, Caja de Burgos mantuvo unos ritmos de crecimiento constantes y comenzó a reorientar toda su estrategia de forma progresiva hacia el segmento empresarial y hacia los emprendedores. En este sentido se puso en marcha el servicio de Emprendedores y ForoBurgos, que se ha convertido con las sucesivas ediciones, en la cita de referencia empresarial de Castilla y León. También en este segundo mandato se fue dibujando la filosofía de la Obra Social y Cultural de Caja de Burgos, uno de los elementos diferenciadores de la entidad con la creación de la Fundación Caja de Burgos y la puesta en marcha del Foro Solidario y el CAB, entre otros hitos.
En el año 2006 volvió a presentarse a las elecciones de Caja de Burgos por el grupo de Impositores siendo reelegido para este último mandato que ahora termina. En estos años, en los que también ocupó temporalmente la Presidencia de la Federación de Cajas de Castilla y León, ha liderado el proceso de reestructuración del sector financiero.
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